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El Palangana seguirá operando 2 años más
El relleno sanitario, habilitado por medio de Licencia Ambiental del año 2000, según la Universidad del Atlántico, no estaría al 100% de su capacidad para almacenar los residuos sólidos del distrito, por tanto, deberá seguir abierto hasta que se complete.
La Universidad del Atlántico entregó los resultados definitivos de la investigación pagada por el Distrito según la cual el relleno no ha alcanzado el tope de almacenamiento. El cambio de sitio no se contempla por ahora.
Lo que hasta hace unos meses eran aproximaciones temerarias de los habitantes de la antigua Comuna Cinco, hoy ha sido confirmado por un estudio de la Universidad del Atlántico, que detalla que aún el relleno sanitario de Palangana tiene capacidad para seguir operando, que en tiempo podría ser medido en dos años y seis meses más, aproximadamente.
La investigación contratada por el distrito para la actualización del Plan de Gestión Integral de Residuos Sólidos (Pgirs) 2022 – 2034 expresa que la salida más viable cuando acabe su vida útil será la ampliación, pues, la reubicación, que es lo que han solicitado los asentamientos del área de influencia, está cada vez menos contemplada como solución a mediano plazo. Aunque hasta julio estará vigente la prórroga de la licencia ambiental, esta indudablemente sufrirá un otrosí hasta que se agote el espacio para la disposición final de residuos.
El secretario de Planeación, Isaac Pertuz Bolaño, realizó una visita al parque ambiental y constató que aún hay espacio para que Aseo Técno de la Sabana (Atesa), bajo la supervisión de la Empresa de Servicios Públicos (Essmar), continúe utilizando este suelo tal como se viene haciendo desde el año 2000, cuando la Corporación Autónoma Regional del Magdalena (Corpamag) emitió la Resolución 1581, mediante la cual se otorgó un primer permiso por 5 años, que luego en 2006 mediante la Resolución 2075 se amplió hasta julio de 2022, y que una vez cumplido el plazo se postergó hasta enero del 2023.
“La vida útil no está concluida, eso se mide en volúmenes y todavía faltarían dos años por lo que nos informan. Según los términos de los expertos aproximadamente faltan 2 años y medio. Ya se tiene el nuevo Pegirs, que era una necesidad, y habla un poco del agua, del mismo relleno sanitario, para el que se establece la posibilidad de una ampliación. No es fácil, lo hemos dicho, una nueva reubicación en cualquier sector del distrito o en cualquier municipio, y por ello, tal vez a futuro, se estaría pensando en un relleno que tengan las condiciones de albergar allí los residuos sólidos de todo un territorio”, expresó Pertuz.
Ya sobre los años extras del Palangana, Alfredo Martínez, subdirector de Corpamag, había explicado que “el relleno todavía tiene un espacio para seguir disponiendo los residuos de la ciudad. Se debe entender que, acá no hay más sitios donde depositar residuos, y en tanto no se tenga un lugar, la ciudad se vería abocada a una emergencia sanitaria”.
HASTA NO LLEGAR AL 100%
Según explica la Secretaría de Planeación, la estrategia es utilizar el vertedero en un 100%, aunado con la optimización de buenas prácticas de reciclaje y con una tecnología que se está desarrollando.
Asimismo, para ir en consonancia con la tendencia nacional, no se descarta hacer uso de rellenos regionales, donde varios municipios de la subregión se puedan unir y se opte por un mismo escenario.
“Estamos en contacto permanente con los moradores del sector con los cuales hemos venido interactuando, hemos elevado una serie de mesas porque hay una inquietud por el impacto ambiental hacia la comunidad. No obstante, el relleno se instaló cuando a su alrededor, a casi 1.200 metros, no había asentamientos. Con el tema de las migraciones, tanto la interna como la externa, hemos tenido unas personas que se han ido quedando en las proximidades del relleno sanitario. Quisiéramos nosotros que fuera fácil reubicar el Palangana, pero no es así. Debemos recordar que este relleno se construye posterior al botadero de basura del barrio 20 de Octubre”, concluyó Pertuz Bolaño.
Estas acciones calificadas por la comunidad como dilatorias, estarían ignorando el fallo del Consejo de Estado en el que se declara como nulo el acto de modificación que sufrió el Plan de Ordenamiento Territorial (POT) 2020, por medio del cual se permitió la construcción del relleno en la ubicación donde actualmente se encuentra.
