HOY DIARIO DEL MAGDALENA
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Inpec lidera acciones contra el hacinamiento carcelario

El objetivo es reducir el número de personas privadas de la libertad aportando más a los derechos humanos para fortalecer así los temas atinentes a la salud, resocialización, alimentación e infraestructura.

Con el propósito de brindar unas condiciones humanizadas a la población carcelaria que se encuentra en el establecimiento penitenciario de mediana seguridad carcelaria de Santa Marta, el director del Inpec, Álvaro Duarte Mantilla busca articular acciones para reducir el hacinamiento.

El deshacinamiento carcelario es un tema crucial en muchos países, por esa razón las autoridades deben considerar medidas como la liberación anticipada, la revisión de la legalidad de la detención y la mejora de los mecanismos de libertad condicional.

Además, el relacionamiento interinstitucional es crucial para abordar el problema del hacinamiento. En ese orden de ideas, el director del Instituto Penitenciario y Carcelario (Inpec) sostuvo ayer una reunión en donde participaron los representantes del Ministerio Público, Personería Distrital, Contraloría, Defensoría del Pueblo, Fiscalía, y miembros del centro de servicios de la rama judicial en aras de lograr aunar esfuerzos para establecer una ruta orientada a des hacinar el establecimiento penitenciario.

“La reunión fue bastante productiva ya que cada asistente desde su rol institucional pudo entregar su granito de arena en esa búsqueda conjunta y articulada para garantizar que las personas privadas de la libertad puedan salir en un corto o mediano plazo. Si nosotros logramos ese objetivo estaríamos aportando mucho más a los derechos humanos para fortalecer los temas relacionados a la salud, resocialización, alimentación e infraestructura”, recalcó.

El abogado Duarte Mantilla sostuvo además que en la ruta se acordó la realización de unas mesas de trabajo con cronogramas específicos bajo la premisa de reducir el número de privados de la libertad ya que según las estadísticas la capacidad establecida está superada.

No cabe duda de que es fundamental desarrollar políticas que fomenten la resocialización, la reparación y la creación de segundas oportunidades para las personas condenadas o detenidas. Fortalecer el régimen carcelario, asignar presupuestos adecuados y ampliar la planta de guardianes también es esencial.

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