HOY DIARIO DEL MAGDALENA
Líder en la región

Por fin

Así es. Por fin los precandidatos están iniciando actividades propias de una campaña presidencial. En desventaja porque uno de ellos arrancó hace mucho tiempo y ahora incluye en su agenda los grandes salones europeos. Igual recibe aplausos que bendiciones.

Pronto sabremos si esta estrategia de las consultas interpartidistas tendrá el mismo efecto que hace cuatro años, cuando candidaturas como las de Vargas Lleras o Humberto de la Calle, se evaporaron. No parece que ahora ocurrirá algo parecido.

Lo que estamos viendo es inédito. Por eso la incertidumbre es mayor. Una vez que conozcamos los resultados de las votaciones por los candidatos que están compitiendo por los tres puestos que les corresponden a las mal llamadas coaliciones para llegar a la primera vuelta, veremos si los datos sobre intención de voto serán los mismos con los cuales nos han abrumado hasta ahora, y que han creado un escenario electoral ficticio.

También, estarán los que no se matricularon en las consultas, como Óscar Iván Zuluaga, Íngrid Betancourt y otros. Y tendremos los resultados de las elecciones para Senado y Cámara, que era la convocatoria del 13 de marzo, desvanecida por razón de la presidencialización del proceso electoral, como nunca había ocurrido.

Conocidos esos datos César Gaviria, jefe del Partido Liberal y Germán Vargas Lleras podrán tomar decisiones que determinarán el resultado final, que esperará la eliminatoria del 29 de mayo, primera vuelta y la del 19 de junio, segunda vuelta, la decisoria. Entretanto, se posesionará el 11 de abril el nuevo gobernante chileno; algún impacto tendrá en nuestro proceso, y en abril habrá las dos vueltas para elegir o reelegir el Presidente en Francia. Sin la novedad que tuvo hace cinco años.

Como lo he manifestado en otros escritos, tengo fuertes dudas sobre las virtudes de lo que ha venido ocurriendo con las consultas. Me pregunto si en realidad fortalecen el sistema político cuya crisis es palmaria.

Cómo debe ser el procedimiento para seleccionar el gobernante es tema que ocupa desde hace años la atención de los analistas. En Estados Unidos hay muchas reservas sobre el mecanismo de primarias. Se trata de asegurar que el procedimiento sea democrático, pero que no vaya en detrimento del papel de los partidos políticos, de capa caída en casi todas partes, ni de la calidad de los aspirantes a un cargo tan exigente. Y que no contribuya al desencanto de los electores con la vida política. Por el contrario, que los haga más participantes y exigentes, y lo más importante, los deje fortalecer el sistema político.

El papel de la infamia en la vida política, siempre presente, está haciendo estragos y apenas comienza. La proliferación de candidatos alimenta ese perverso ejercicio que en ocasiones es bien necesario y en otras realmente perversas.

En pocas semanas tendremos datos que nos permitirán avizorar el futuro con más certidumbre así lo que se anticipe no coincida con los anhelos de muchos ciudadanos. Las mayorías silenciosas, por lo menos el 50% del potencial de votantes, si quisieran serían decisorias… pero durante décadas han preferido la indiferencia. La verdad, han decidido así no estén conscientes de su papel. Y en las fechas que se aproximan será lo mismo. Si para el plebiscito sobre el Acuerdo de Paz solamente participó el 36%… qué se puede esperar.

*ExMinistro de Estado 

Este sitio web utiliza cookies para mejorar su experiencia. Asumiremos que está de acuerdo con esto, pero puede optar por no participar si lo desea. Aceptar Leer más