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James realizó ayer su último entrenamiento junto a su entrenador personal
Durante su estadía en la ciudad, el creativo parecía una estrella de rock, siempre acompañado por un fuerte esquema de seguridad y sin dar algún tipo de declaración.
James Rodríguez llegó el pasado sábado a Santa Marta después de una temporada de muchos éxitos con el Bayern Múnich, y eligió la ‘Perla de América’ para pasar cuatro días de su periodo de vacaciones antes de unirse en el mes de enero a trabajos con el equipo alemán.
Durante su estadía en la ciudad, el creativo parecía una estrella de rock, siempre acompañado por un fuerte esquema de seguridad y sin dar algún tipo de declaración. Solo se le pudo ver por momentos en varias playas o en algún recorrido desde muy temprano en su entrenamiento matutino.
El volante de la Selección Colombia también tuvo tiempo para jugar un partido de fútbol con sus amigos.
Fueron varios los turistas y samarios que durante esos días se acercaron a las afueras de su apartamento para poder ver a su ídolo, pero lastimosamente no pudieron y al momento que salía del edificio su vehículo no hizo parada para firmar autógrafos o tomarse una foto. Por su parte, su exesposa, Daniela Ospina, tomó un baño en la playa en el sector de Bello Horizonte donde atendió de manera amable a las personas que se le acercaron para preguntar por James o sacarse una fotografía.
James Rodríguez compartió con el cantautor Wilfran Castillo.
EL ‘10’LA HACE FALTA A MADRID
El Real Madrid no ha tenido una buena mitad de temporada y las salidas de algunos jugadores en agosto han sido determinantes para los malos resultados en la Liga de España. Morata, Mariano, Pepe y James son los jugadores que la hinchada blanca más extraña.
En el inicio de temporada todo parecía que seguiría igual a la pasada, pues golearon al Barcelona en la Supercopa de España, peleaban los primeros lugares de la Liga y en Champions luchaban por el primer lugar del grupo con el Tottenham, sin embargo con el pasar de los partidos, algunos jugadores bajaron su nivel y se empezó a extrañar la mal llamada segunda unidad, quienes fueron los responsables de cuidar la Liga, mientras que el equipo titular luchaba por la Champions League.