Noticias de Santa Marta, el Magdalena, y el mundo!
El proyecto que busca instaurar en Colombia la prisión perpetua para violadores y asesinos de niños continuará su trámite en segunda vuelta en el Congreso, durante el periodo legislativo que comienza a partir de marzo de este año.
La iniciativa fue aprobada en cuarto debate en diciembre pasado en la plenaria del Senado, pero aún le restan otros cuatro debates por tratarse de una reforma constitucional.
Este acto legislativo será objeto de una serie de modificaciones de parte de los congresistas y del Gobierno Nacional, para salvaguardar los derechos procesales de las personas.
Algunos parlamentarios han advertido que este proyecto abre la puerta para que personas que han sido severamente condenadas por agresión a menores, como Rafael Uribe Noguera y Alfredo Garavito, puedan acogerse a la revisión de sus sentencias, una vez cumplan 25 años en la cárcel, lo cual sería un conejo a la idea de estar en prisión de por vida.
Ante esto, el senador Miguel Ángel Pinto, ponente de la reforma, confirmó que “al proyecto hay que hacerle varias modificaciones, y se las vamos a hacer en la segunda vuelta. Mantuvimos el texto de Cámara, con el fin de que el proyecto no se hundiera”.
Asimismo, Pinto afirmó que se harán algunas correcciones en la redacción del texto, para evitar que quienes cometan delitos menores, como el acoso sexual, sean objeto de una sanción de cadena perpetua.
“En la segunda vuelta va a ser bastante modificado el proyecto. No podemos dejar los delitos abiertos, estamos hablando solo de las faltas contra niños, niñas y adolescentes que tienen que ver con el acceso carnal violento y con el homicidio doloso contra estos menores, y hay algunas voces que piden incluir el feminicidio dentro de los delitos que puedan ser sancionados hasta con cadena perpetua”, indicó.
El proyecto de prisión perpetua para violadores y asesinos de niños, contiene varias disposiciones encaminadas a proteger las garantías procesales de las personas como la doble instancia y la doble conformidad.