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Antiguos miembros de las FARC, reconocieron su responsabilidad por asesinatos y desapariciones forzadas cometidas en el municipio de Palestina (Huila), a lo largo del conflicto armado en el país.
“Venimos a poner la cara, a decirle a las familias que nos equivocamos y que por eso firmamos un acuerdo de paz. Esto que estamos haciendo obedece a nuestra voluntad y decisión de que esto no se vuelva a repetir. No queremos volver a la guerra” dijo `Fabián Ramírez´ durante el encuentro.
En el acto se abordaron casos específicos que afectaron al territorio, como los homicidios de Jaime Guerrero en 1985, de Niray Alfonso Arredondo Piamba y Camilo Carvajal en 1985; además de las desapariciones de Julio César Córdoba en 1987, Arbery Eduardo Alvarado y Jhon Trejos en el 2001; al igual que el reclutamiento forzado de Omaira Sánchez.
Durante este encuentro también pidió perdón Omaira Rojas `SONIA´, quien dijo que asistió a este evento para reconocer ante las víctimas que no medimos el impacto que se iba a causar en las familias y en los jóvenes por permitir el ingreso desde los 15 años.
Agregó que las víctimas: “han sufrido por la entrada de los jóvenes a las FARC, sabemos que llevan el dolor y continúan en la búsqueda de sus seres queridos. Y estamos nosotros comprometidos para trabajar de la mano en esa búsqueda”
Por su parte el presidente de la Comisión, Francisco de Roux, resaltó la actitud de los exguerrilleros al pedir perdón: “Resaltó la actitud de quienes estuvieron en la guerra como FARC y que hoy en día se presentan ante el pueblo con un corazón sincero para reconocer el mal que hicieron y hacer un examen delante de todos y comprender que cometieron errores y crímenes. Y que han tomado la decisión sincera y franca de jugársela toda por la paz y comprender que la verdadera revolución es el respeto al ser humano y la construcción de una paz entre todos los colombianos en nuestras diferencias”
¿QUÉ SUCEDIÓ EN PALESTINA?
Palestina se ubica al sur del departamento del Huila y su ubicación geográfica fue determinante y estratégica para los grupos ilegales, convirtiéndose en un paso obligado de estructuras armadas al servicio de economías ilegales.
La violencia, durante las últimas décadas, convirtió a Palestina en el epicentro del conflicto armado con el enfrentamiento de las FARC , el ELN, el EPL, el M-19 y el Movimiento Armado Quintín Lame (MAQL).
La desaparición forzada y el reclutamiento de jóvenes fueron las prácticas más recurrentes contra los habitantes, pero también se presentaron desplazamientos forzados, despojos de tierra y violencia política contra integrantes de la Unión Patriótica.
Según cifras de la Unidad de Víctimas, en este municipio hay 2.306 víctimas del conflicto armado.
/Colprensa