Exteriores del Palacio Episcopal ‘sufren‘ a causa de la delincuencia

Cada vez más aumenta la ‘ola’ de robos a las edificaciones del Centro Histórico. Ante la delicada situación del antiguo FER, el cual está siendo desvalijado y desocupado por delincuentes, ahora se suma a esta problemática la fachada de la Curia o el Palacio Episcopal.

La manija y una campana de la puerta principal, ambas hechas de bronce, fueron robadas por inescrupulosos; quienes incluso también se llevaron una caneca de metal ubicada justo en las afueras de la Curia y la nomenclatura de la oficina de Jardines de Paz.

Según información suministrada por transeúntes de la zona, los delincuentes poco a poco han ido desprendiendo las letras metálicas que conforman los nombres de los establecimientos que se ubican allí. Acto seguido, los elementos metálicos son llevados y vendidos a las populares ‘chiveras’.

Las escaleras de la plaza de la Catedral también han sufrido esta ‘ola’ de delincuencia, pues las luminarias que se encontraban entre cada escalón, absolutamente todas fueron robadas.

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