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Mientras tengas fuerza: insiste y persiste
LINEA POSITIVA
Por
MARÍA DEL PILAR TORRALVO VILLERO
Si nos dejamos contagiar por el caos existente que invade al mundo o escogemos ser parte activa del proceso de transformación, para reinventarnos va a depender de la responsabilidad que tengamos con nosotros mismos, para procurarnos un verdadero estar bien.
Creo que todos o casi todos apostamos a la felicidad, encontrando motivos para existir, para algunos es la familia, el trabajo, la pareja, los viajes, el servicio a los demás, su salud mental, su salud física etc. aun en estos momentos en que los índices de suicidios en el mundo cada vez se incrementan más.
Es de conocimiento de todos que requerimos de un proceso de transformación para elegir motivarnos a nosotros mismos, lo cual implica que estemos en el escenario de la motivación individual, que necesariamente la vamos a sentir en nuestro tono de voz, en la forma como nos comunicamos, en el caminar, es decir en toda nuestra humanidad. Motivarnos permitirá poder motivar a los demás, por ello hemos escuchado “nadie da de lo que no tiene”.
Si hemos pensado dejar huellas en este mundo a través de nuestro ser, creo que en estos momentos de turbulencia que vivimos, es la gran oportunidad que estábamos esperando y que todos tenemos para motivarnos al respecto.
Hablando con objetividad no podemos negar que la guerra solo trae más guerra, y que esta se convierte en colectividad y en comportamientos de caos como el que viene aconteciendo desde tiempos pasados, lo cual se mantiene y perpetua en conflicto vivenciado en Ucrania, Etiopia, Afganistán, Estados Unidos y China, entre otros.
También se viven tiempos de prepotencia humana que genera la emoción negativa del odio, se observa el ego en su esplendor que trae división, la oscuridad que no permite ver la luz. Lo anterior incide en los bajos niveles de tolerancia y en cuadros clínicos a nivel de salud mental.
Por otra parte, a veces encontramos el virus de la queja incrustado en las células humanas con pensamientos y comportamientos relacionado con situaciones personales, y es ahí donde debemos de pensar cómo se puede hacer, es decir que estrategias son válidas para mejorar o buscarle una solución a lo que nos pasa en el plano personal.
Hay unas preguntas fundamentales que debemos hacernos para que se actúe con objetividad y asertividad ¿Qué puedo hacer para salir de esta situación? ¿Qué acción debo implementar? ¿Qué ayuda debo buscar?
Sin embargo, hay otra cara de la moneda, porque hay personas en el mundo que están eligiendo en estos momentos sustituir las quejas, las excusas por propuestas para salir adelante.
Lo anterior nos invita a experimentar esa motivación interna, y pasar a la acción utilizando un lenguaje de estímulo para con nosotros mismos, hablar de oportunidades en lugar de problemas, retos en lugar de dificultades, eliminar la palabra trataré y nunca del vocabulario que se está utilizando.
Se requiere eso si paciencia con nosotros mismos, porque algunos términos de connotación negativa, la mente por condicionamiento las convirtió en habito y se pronuncian automáticamente, pero insistir en cambiar ese vocabulario del “escenario imposible”, donde encontramos: No puedo, no soy capaz, no lo lograre etc., debe ser prioridad en nuestro actuar.
La invitación es a ser o seguir siendo una persona con esa motivación interna, convirtiéndose en luz, irradiando todo a su alrededor, con energía positiva, dando de si sin pensar en sí y conocedores de las necesidades del otro, empáticos en otras palabras persona con actitud de servicio, que sirven sin pedir nada a cambio, su satisfacción es ayudar a los demás, , es decir en ser generosos, solidarios, proactivos, buscando asesoría cuando la necesiten ( Humildad) y ser sobre todo Luz, para hacerles la vida a otros más llevadera.
Conozco seres humanos con estas características, que inspiran confianza.
Estas personas de Luz existen también en las empresas sienten pasión y amor por aportar a los objetivos, hacen parte de las soluciones, no de los problemas, las metas son retos que alcanzan, solidarizándose con los otros, que no van a su mismo ritmo, se respetan así mismas y respetan a los demás, se comunican con asertividad, sin herir al otro y aunque libran batallas internas contribuyen a la efectividad del área a la que pertenecen en la empresa y a la empresa como un todo.
Por ello, independiente de la oscuridad, una persona de Luz insiste y persiste en aportar a la construcción de un mundo mejor, y por ende a su estabilidad emocional.
Es consciente que sus motivos le dan sentido a su existencia, que su fuerza proviene de su interior en donde tiene una relación directa con Dios.
Por ello mientras tengas fuerzas insiste y persiste hagamos la diferencia.