HOY DIARIO DEL MAGDALENA
Líder en la región

Billboard-Sociales

“Represento muy bien a la mujer colombiana”

Gabriela Tafur Nader recibió la corona de manos de Laura González, señorita Colombia 2017-2018.

“El respaldo que he recibido de la gente en tan corto tiempo ha sido impresionante. Estoy realmente agotada pero emocionada a la vez de todo el cariño que he recibido y por todo lo que se viene”, manifestó Gabriel Tafur Nader.

 

Gabriela Tafur Náder, la representante de Valle se convirtió en la Señorita Colombia 2018- 2019, después de una ceremonia realizada en el Centro de Convenciones de Cartagena de Indias.

La ‘soberana’ de 23 años recibió el cetro y la corona por parte de Laura González Ospina, como reconocimiento a esta nueva etapa que empieza como ‘embajadora de la belleza colombiana’.

Gabriela fue siempre una las favoritas del concurso para quedarse con la corona y en la noche del lunes festivo cautivó al jurado con su belleza y el carisma que la caracterizó durante todo el certamen.

El reto de Gabriela Tafur era grande. Quería darle la corona número doce en la historia del Concurso Nacional de Belleza a su departamento, Valle del Cauca, y el segundo título en menos de mes y medio.

Con 23 años de edad, tiene entre sus fortalezas ser profesional en Derecho de la Universidad de los Andes de Bogotá, junto a su alto dominio en inglés y portugués.

Este martes, en medio de las sesiones fotográficas y los distintos compromisos con el Concurso Nacional de Belleza, Gabriela habló con Colprensa sobre esta experiencia real y lo que viene para ella en su año como Señorita Colombia.

 

Objetivo claro

¿Cómo han sido estas primeras horas como Señorita Colombia?

Realmente todo es increíble en estas primeras horas de reinado. El respaldo que he recibido de la gente en tan corto tiempo ha sido impresionante. Estoy realmente agotada pero emocionada a la vez de todo el cariño que he recibido y por todo lo que se viene.

 

¿Era un reto representar al departamento que tiene en la actualidad a otra Señorita Colombia?

La verdad era todo un reto. En un principio me preocupó un poco porque las probabilidades de que un mismo departamento lograra la corona de Señorita Colombia en menos de mes y medio parecía imposible.

Pronto entendí que independientemente al departamento que se esté representando, lo que se busca es a la mujer más idónea que pueda representar a todo un país, y si uno cumple con todas esas cualidades no importa el departamento.

 

Los diez días del concurso en Cartagena, ¿fue lo que esperaba?

No fue lo que esperaba, fue muchísimo más. El amor que recibí por parte de los cartageneros me dejó asombrada. Lo cierto es que el Valle del Cauca es un departamento de reinas, pero Cartagena es una cosa de locos, porque en esta ciudad la gente vive y muere por sus reinas, lo que me dejó completamente anonadada, no pensé encontrarme con tanto cariño, con tanto respaldo y apoyo de todos los cartageneros.

Ellos hicieron que esta fuera una de las mejores experiencias de mi vida. Si lo pudiera volver hacer, lo haría de nuevo sin pensarlo.

 

¿Cómo fue la relación con las otras candidatas?

Tuve la oportunidad de compartir con todas, fuimos muy solidarias y grandes compañeras. Al ser Valle, estaba al final de la fila, con quienes más compartí fue con Tolima y Sucre. Además, nuestras habitaciones estaban un poco alejadas de las demás, así que nos manteníamos juntas, siempre ayudándonos para encontrar la mejor versión de cada una, siempre acomodándonos el vestido, cuidándonos entre nosotras, lo que me gustó mucho. Éramos más compañeras que competidoras.

 

¿Cuál fue el momento más difícil del concurso?

Creo que el momento de más tensión en la Velada de Elección y Coronación fue antes de salir con el vestido de gala, pero la verdad es que no me acuerdo de la mitad de la ceremonia (risas).

 

¿Y la pregunta final?

Yo hablo como lora mojada entonces la pregunta no me asustaba mucho, pero sí el hecho de que las preguntas eran muy precisas, era responder de manera muy directa, eran tres palabras para describir a Colombia, por lo que no me podía extender como lo suelo hacer, pero creo que me fue muy bien.

 

Al ganar la corona, ¿con quién fue la primera persona que habló?

Con nadie hasta que horas después pude llegar al hotel donde estaba toda mi familia. Cuando me coronaron no los dejaban estar cerca, yo estaba en medio de la prensa, así que dejamos todo para el hotel, los dejaron ingresar a mi habitación con mis padres, mis hermanos, mis tías, lo cual fue muy emocionante.

 

¿Cómo fue la preparación para lograr esta corona?

Me coronaron el 25 de abril en el Valle del Cauca, pero yo venía preparándome desde el mes de noviembre del año pasado que sabía que sería la próxima Señorita Valle. Con la corona de Señorita Colombia culminamos un proceso y ahora viene más preparación para el concurso internacional en el cual participaremos.

Después de cinco años radicada en Bogotá, me devolví a Cali y no paré de trabajar en mi preparación de ocho de la mañana a cinco de la tarde, con clases de fogueo periodístico, estética y pasarela. Me preparé en todos los aspectos.

 

¿Qué viene como Señorita Colombia?

La verdad no sé. No tengo idea bien de lo que viene, tanto de la agenda como de mis obligaciones, apenas estoy despertando del sueño de la coronación. Veremos más adelante.

Dejé mis proyectos personales a un lado cuando renuncié a mi trabajo el pasado mes de mayo porque quería entregarlo todo por la corona. Ahora que la tengo, viene un año exclusivamente dedicado al Concurso Nacional de Belleza y todo lo que se viene.

 

¿Qué significa ser Señorita Colombia?

Ser reina para representar a la mujer en este momento, en este contexto. Creo que represento bien a la mujer colombiana de hoy, quien es profesional, una persona disciplinada que puede ser un buen ejemplo a seguir para otras mujeres.

 

¿Desde cuándo quería ser Señorita Colombia?

Hace poco. Siempre dije que no quería ser reina, pero mi nana siempre decía: ‘Miss Colombia, Miss Mundo y Miss Colombia en una sola’, pero yo siempre le decía que no. A medida que pasaba el tiempo y terminaba mi universidad, se presentó la posibilidad de representar a mi departamento por decreto y no por concurso, lo cual para mí fue un gran honor. /[email protected]

Este sitio web utiliza cookies para mejorar su experiencia. Asumiremos que está de acuerdo con esto, pero puede optar por no participar si lo desea. Aceptar Leer más