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Apareció pediatra: fue víctima de hurto con escopolamina

Después de la angustiosa noche que vivieron todos los integrantes de la familia del médico pediatra Richard Enrique Fiorillo Suárez, de 51 años de edad, por su repentina y extraña desaparición, la calma volvió a todo el núcleo en la tarde de ayer cuando el profesional de la salud apareció.

De acuerdo con los detalles conocidos después de la aparición, al parecer, el médico pediatra, que labora en el hospital Julio Méndez Barreneche, fue víctima de un hurto, presuntamente, con escopolamina, por lo que perdió la noción del tiempo y desconocía del lugar en el que se encontraba.

Durante el robo, las personas que lo cometieron se llevaron todas sus pertenencias personales, dispositivos móviles, dinero en efectivo y también le vaciaron sus cuentas bancarias.

Una vez fue encontrado, el pediatra fue conducido hasta la sala de urgencias del centro asistencial más cercano, en donde hasta el cierre de esta edición estaba siendo valorado por colegas profesionales especializados.

La última vez que sus familiares supieron de su paradero, fue al caer la noche del martes a través de una llamada, en la que avisó que iba saliendo de su jornada laboral en su camioneta Toyota Fortuner color blanco de placa KKN-717 de Santa Marta.

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