El valor del ordenamiento ecológico

Nuestro departamento, rico cuál que más en recursos físicos, requerido está en manera importante y urgente de fortalecer su política ambiental, proteger, conservar la biodiversidad y los recursos naturales, aspecto que debe ser coordinado para el ordenamiento ecológico en todos sus niveles, por las autoridades instituidas local, departamental, regional y nacionalmente para el efecto. Es este un válido instrumento de política ambiental que tiene como principal objetivo determinar el diagnóstico de las condiciones ambientales y tecnológicas, regular los usos de suelo fuera de los centros de población en el contexto de ordenamiento urbano ecológico sustentable, con miras a fungir como modelo de buenas prácticas que se traduzca en bienestar social para los municipios todos del departamento.

Es igualmente una estrategia para respaldar y de paso favorecer la construcción de un modelo de planeación del territorio que garantice la organización social para el bienestar de los pobladores y del hábitat, contribuir a subsanar e inhibir las desigualdades imperantes, ser guardián de la diversidad biocultural y responder a las necesidades actuales y por venir en el departamento, a efecto de dar seguimiento a las acciones que sobre este especial particular se desarrollen.

Es abordar con la decisión requerida, las necesidades prioritarias en materia ecológica y ambiental, como el saneamiento y limpieza de ríos, quebradas, lagunas, ciénagas y demás otros aspectos, para solo citar algunas, así como la construcción, rehabilitación y puesta en operación de plantas de tratamiento de aguas residuales en los municipios del departamento donde fuere menester.

De igual manera, y que no debe perderse de vista para trabajar en ello, es adelantar una estrategia ambiental contra la tala ilegal y la deforestación, bajo un esquema frene de tajo la pérdida de la vegetación forestal por actividades ilícitas, en lo que ayuda la implantación de filtros de revisión y de inspección, con lo que se logrará asegurar que no haya más una tala indiscriminada en detrimento del medio ambiente departamental; esfuerzo que debe desarrollarse, repito, entre los distintos órdenes de gobierno.

Importa y ayuda en esto de manera importante, el compromiso de tener una conciencia ecológica en la población, estar sumamente alerta y en responsabilidad con el desarrollo sustentable en el departamento, teniendo como prioridades reales la biodiversidad y el ordenamiento ecológico territorial. Es buscar que las obras que se emprendan tengan un ordenamiento territorial en el que incluido esté el cuidado del medio ambiente, con lo que se vela por los intereses de los magdalenenses, amén de ocuparse de las áreas Naturales Protegidas y las acciones de conservación, de los ecosistemas vitales de selvas secas, manglares y humedales, así como respecto de las diversas especies protegidas de flora y fauna; y, la revisión permanente de las acciones contra el cambio climático en todas sus zonas. saramara7@gmail.com