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‘Essmar oculta pruebas para sancionar a Atesa’
El presunto encubrimiento se refiere a la información que la Empresa de Servicios Públicos conoce sobre el ingreso de material de construcción y escombros al relleno sanitario de Palangana.
Desde aquella madrugada en la cual la entonces agente interventora Yahaira Díaz en representación de la Superintendencia de Servicios Públicos, aceptó el ´cambiazo´ de Interaseo por Atesa, y la ciudad amaneció con un nuevo concesionario para la prestación del servicio de aseo público hasta la fecha, todo lo que ha venido sucediendo alrededor de las dos ´gemelas´ ha sido como el olor de las basuras, fétido. Y para apaciguarlo han contado con la complicidad de la empresa Essmar, la misma que se supone es la encargada de supervisar el contrato.
Pues bien. La autoridad ambiental del Distrito ha ido husmeando para sancionar a la firma Atesa, pero en el camino se ha tropezado con algunas ´vangabunderías´ de la Essmar empresa manejada por la EPM de Medellín, ciudad de donde es Atesa.
El papel de la Empresa de Servicios Públicos del Distrito (Essmar), intervenida por la Superservicios, a través del agente especial de EPM, ha quedado en entredicho tras una serie de revelaciones que darían cuenta cómo desde su rol de ente supervisor del aseo público de la ciudad, ha omitido informar las presuntas irregularidades que el operador del contrato de Concesión 007 de 1993, Aseo Técnico de la Sabana (Atesa), viene cometiendo con su anuencia.
Se trata del ingreso diario de grandes cantidades de Residuos de Construcción y Demolición (RCD), camuflados entre desechos ordinarios.
Esta conducta, de acuerdo con expertos, además de ser contraria a la Ley que regula la materia y de disminuir la vida útil del vertedero de basura, es también una manera de aumentar el tonelaje que se pesa, luego se deposita en el relleno y luego es cobrado en la factura de energía. Con los escombros se dispara la báscula que ‘revienta’ el bolsillo de los samarios.
“Los carros que utilizan para la recolección de escombros no son gestores autorizados. La empresa Essmar no hace la auditoría, recordemos que en el 2021, producto de un proceso sancionatorio, se estableció un plan de mejoramiento de vigencia de 6 meses, que a la fecha no se ha cumplido”, denunció el Departamento Administrativo de Sostenibilidad Ambiental (Dadsa), Jaime Avendaño quien defendiendo a la comunidad se ha echado al hombro esta investigación
El funcionario público expresó que en el Concejo peligrosamente se observan teorías que excusan esta conducta; arguyen que depositar escombros al relleno no tendría por qué tener reparo alguno. Por otro lado, asegura que en Santa Marta desde el año 2018 hay un lugar habilitado para recibir escombros, que no es usado, porque Atesa no quiere pagar por la disposición en ese sitio, por eso les sale mejor llevarlo al relleno donde se les convierte ese peso en dinero.
Y sobre la acción popular que la alcaldesa Vina Johnson está contemplando para declarar la caducidad del servicio a cargo del privado, anunció que “estamos cumpliendo con el procedimiento legal. Ya hemos iniciado un proceso sancionatorio por ese tema de disposición de material especial al relleno que lo están recogiendo de los puntos críticos y lo llevan a este sitio”.
Sobre este caso en particular, la Contraloría el año anterior evidenció Residuos de Construcción y Demolición en el Palangana, exponiendo las pruebas que soportan la denuncia.
“Encontramos pesajes de camiones por 30 toneladas, siendo esto una exageración, violando el peso máximo aprobado para esta empresa. Y cuando esto se da, se debe cobrar la cantidad excedente que entra al relleno sanitario, el cual no puede recibir escombros, pero aun así lo estarían haciendo, cobrándole a los samarios valores no permitidos”, dijo un veedor ambiental del distrito.