Muerte de profesora habría sido un feminicidio: Fiscalía 

El 10 de octubre del año 2018, los habitantes del municipio de Soacha, Cundinamarca, se conmovieron tras conocer la muerte de Gladys Rodríguez Cañón en la ciudad de Santa Marta.

Los hechos ocurrieron cuando la mujer disfrutaba con su esposo, Jorge Enrique Pulido Gaviria, en un apartamento que recién había adquirido en el Edificio Wind, ubicado en el sector de Playa Salguero.

Las primeras versiones que se conocieron de la muerte de Rodríguez Cañón indicaban que se había lanzado desde la terraza del piso 17 de la mencionada edificación después de una discusión que había sostenido con su pareja Jorge Pulido.

El relato que entregó Pulido a las autoridades que acudieron como primeros respondientes al lugar del hecho, fue que, tras esa pelea, Gladys corrió por el balcón del apartamento hasta llegar al borde de la pared, extendió los brazos hacia el frente y saltó al vacío. La caída de tal altura ocasionó que su cuerpo quedara partido en dos partes.

NO CONVENCIÓ LA VERSIÓN 

Sin embargo, a Luis Andrés Torres Rodríguez, hijo de Gladys Rodríguez, dicha versión nunca le convenció, por lo que desde ese entonces no descansa en su afán de buscar justicia. El caso de su madre tomaría un giro de 180 grados, el cual pasaría de ser un suicidio a un feminicidio, de acuerdo con los materiales probatorios que van encontrando las autoridades durante el proceso investigativo.

Torres Rodríguez se puso las botas de investigador. Después de 4 años y tres meses de la muerte de su progenitora le llegó un aviso como caído del cielo. Un amigo suyo lo enlazó con el cementerio Jardines del Apogeo en Soacha (Cundinamarca). La razón: había una solicitud para exhumar y cremar el cuerpo de su madre. La hizo, según pudo corroborar El Colombiano, el entonces esposo de Gladys: Jorge Enrique Pulido Gaviria.

A Luis Torres también le llamó la atención los comportamientos que empezó a tener Jorge Pulido hacia él.

Según sus relatos, desde entonces no le permite la entrada al colegio Liceo Pedagógico Cundinamarca, del que Pulido actualmente es gerente general y propietario de un 50% de las acciones, y cortó cualquier vínculo que los uniera. Una conducta que estos cuatro años le ha parecido, cuando menos, sospechosa.

Aunque las pesquisas de este caso avanzan a paso de tortuga, como todos los procesos en territorio colombiano, a Luis Torres recientemente la Fiscal que lidera la investigación, Sonia Gallego Duque, le dio una esperanza para seguir.

Primero, que los resultados del examen toxicológico determinaron que Gladys Cañón tenía un nivel bajo de alcohol en la sangre; segundo, que la autopsia psicológica concluyó que la mujer no tenía tendencias suicidas; y tercero, que está pendiente de hacer el peritaje físico en el apartamento en Santa Marta, pues se han hecho remodelaciones.

¿QUIÉN ERA GLADYS? 

De Gladys Rodríguez se supo que era muy querida en el municipio de Soacha. Fue madre joven y soltera (su primer hijo fue Luis Andrés) y, con el paso de los años, se convirtió en una mujer líder y empresaria.

De hecho, el colegio del que era propietaria es el Liceo Pedagógico Cundinamarca, un plantel educativo que tiene 29 años de estar vigente y cuenta con dos sedes en ese municipio. Para el momento de su muerte, Gladys era la rectora de la institución.

Luis Andrés, su hijo, recalcó que era una mujer que amaba la vida, a sus nietos y que tenía planes a futuro, en el que se encontraban viajar y hacer inversiones. Por ello, compró ese apartamento en Santa Marta e invirtió en una editorial de otro país.