Se reduce número de conductores borrachos

No obstante, de las 70 pruebas practicadas, 44 han arrojado grado de alcohol 0 y 1. En comparación con el 2022, se observa una disminución en los reincidentes. 

La llegada de Ernesto Castro a la secretaría de Movilidad de Santa Marta, desempolvó los kits de alcoholimetría que parecían estar archivados en esta dependencia. Una de las principales causas de accidentes en el país, junto al exceso de velocidad y fallas mecánicas, estaba pasando de agache en la ciudad.

En las dos primeras salidas, los Agentes de Tránsito detectaron en las avenidas del Libertador y del Ferrocarril, en la Bahía y la subida al Ziruma, a 18 personas que conducían en estado de alicoramiento, su irresponsabilidad obligó la inmovilización del vehículo.

En su reciente participación en el Concejo, Castro Coronado dejó ver que en el año pasado se hizo un pobre seguimiento a este origen de siniestralidad, por tanto, desde el 14 de enero era un trabajo para el cuerpo de Agentes practicar los test en los puestos de control.

“En el tema de la alcoholemia se venía bajando la guardia, tomamos la decisión de que el control de esta infracción tenía que ser sostenida, las cifras son el reflejo. En el año 2022 fueron 107 comparendos que se aplicaron durante todo el año, apenas entre enero y febrero del 2023 se han aplicado 70, haremos que esta política se mantenga.

Esto tiene dos partes: una preliminar, mediante la cual se determina si hay alcohol para así pasar a la prueba, esto evita el desgaste, como lo establece la Ley. Cuando arrancamos en el primer fin de semana, el 90% de los preliminares salieron positivos, pero ahora apenas el 10% resulta con algún grado. Es decir, que la gente ha entrado a la conciencia. Le he dicho al equipo de Agentes que la idea es llegar al 0%. Ojalá que como ciudad entendamos que los vehículos los podemos dejar guardado mientras se consume licor”, explicó el secretario de Movilidad.

Del total de pruebas tomadas en la presente anualidad se resalta el resultado de 20 que fueron grado 0; 24, grado 1; 6, grado 2; 8, grado 3 y 11 eran renuentes. El año anterior 36 personas fueron descubiertas en varias oportunidades en esta conducta, y 15 más, fueron determinadas en grado 3, estadio para el que se establece una medición igual o superior a 20 miligramos de etanol por cada 100 mililitros de sangre, acarreando sanciones de hasta $27. 840.240 y la cancelación de la licencia de hasta por 10 años.

“Santa Marta retoma el tema de la alcoholemia, estábamos rezagados con esa cuestión. La Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV) nos entregó unos alcohosensores y un personal idóneo para retomar los controles a las personas que creen que tomados manejan mucho mejor. Seremos contundentes porque se debe reducir las cifras de accidentalidad», explicó Castro.

En este sentido, la ANSV explicó que a nivel nacional entregó 259 alcohosensores e igual número de kits de intervención para puestos de control en las vías de 102 entidades territoriales. Para la capital del Magdalena,  la última entrega fue de cinco kits junto a los aparatos medidores de alcohol, y además fueron preparados 18 Agentes para la toma de muestra. En todo el país la cifra de capacitados fue de 1.036 personas, quienes  recibieron instrucción en el manejo de estos equipos.

Sólo el reciente fin de semana de inicio de los días santos, en el Centro Histórico la Secretaría de Movilidad realizó 26 pruebas de alcoholemia, logrando, además, la aplicación de 18 comparendos por estacionar en espacio público e inmovilización de motocicletas que violaron la prohibición del parrillero hombre.