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Murió contratista de Air-e que fue atacado a cuchillo
Tras luchar por dos días en la Unidad de Cuidados Intensivos de la clínica Adelita Char en Barranquilla, murió a las 6:00 de la tarde de este sábado 31 de diciembre el contratista de la empresaria Air-e, Rudy Narváez, de 43 años, después de ser herido a cuchillo en medio de un acto de intolerancia el pasado 29 de diciembre en el bulevar de Simón Bolívar. Su agresor permanece bajo recaudo de las autoridades.
La información de la muerte del empleado de la firma Inmel, fue confirmada por voceros de la compañía distribuidora de energía. «Siendo las 18:00, después de sufrir un paro cardiorrespiratorio, fallece en la clínica Adelita de Char el técnico Rudy Narváez. Quien desde el 29/12/2022, fue herido durante el ejercicio de sus labores», detalló la compañía en un breve reporte.
Seguidamente, la compañía lamentó el fallecimiento y “rechaza enérgicamente los actos de intolerancia de algunos usuarios en contra de operarios de la compañía, quienes en desarrollo de sus funciones de corte de energía, detección de casos de robo y reparaciones técnicas son agredidos físicamente y que en este caso le ocasionaron la muerte al empleado”, de acuerdo se mencionó en un comunicado.
Recordemos que el caso se presentó cuando el empleado había llegado a eso de la 1:30 p. m. al sector de la carrera 6C con calle 19, cerca al bulevar del barrio, a adelantar una acción de suspensión del servicio en una vivienda por mora en el pago. En medio de las maniobras, este habría ocasionado un corte de manera involuntaria en otro domicilio y eso desató la furia del habitante, que luego de estar separados se le fue encima con un cuchillo que sacó de su vivienda.
El contratista sufrió una herida en la pierna izquierda, afectándole la vena femoral, según informe médico. Tras los hechos fue llevado al Paso Simón Bolívar, pero debido a la gravedad de la herida fue remitido al Camino Adela de Char, antiguo Hospital Pediátrico, donde se produjo su deceso.
Trascendió que Rudy era tecnólogo en electricidad y llevaba bastante tiempo laborando como contratista de la empresa de energía, incluso con la antigua Electricaribe. Este residía con su pareja en el barrio El Campito, no dejó hijos y era el quinto de siete hermanos.
Óscar Julio Narváez Camacho recuerda a su hermano Rudy como una persona noble, y pidió «Que le caiga todo el peso de la justicia a este señor. No vamos a permitir que este asesinato quede impune. Debe pagar su pena en la cárcel» dijo el hermano de la víctima.
Por su parte, el presunto responsable del hecho, identificado como Jesser Josué Rodríguez Altamar, de 22 años fue capturado por la Policía y conducido a la URI de la Fiscalía, inicialmente por lesiones personales. Ahora deberá responder por el delito de homicidio.