HOY DIARIO DEL MAGDALENA
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El ‘mamarracho navideño’ en realidad costó $2.046 millones

Ante el silencio que ha guardado la Empresa de Servicios Públicos sobre la contratación para el adorno decembrino, se conoció que no fue uno, sino tres contratos, con tres empresas diferentes, para el alquiler, logística, transporte, montaje, puesta en marcha y mantenimiento de la iluminación. 

Reza en la sabiduría popular que “primero cae un mentiroso antes que un cojo. Ello le cae como anillo al dedo a la empresa Essmar y su agente interventor EPM.

La euforia por el supuesto valor austero del alumbrado navideño contratado por la Empresa de Servicios Públicos (Essmar) para este 2022, duró en el ambiente lo mismo que dura un merengue en la puerta de un colegio, o sea, nada. Pues, de aquel contrato medido y centrado de $139 millones, no quedan sino los elogios, dado que la cifra se infló.

Ahora se ha conocido que detrás del sobrio ´mamarracho´ decembrino instalado, se esconden los costos adicionales que la misma entidad ha preferido callar, toda vez que al haberse contratado con tres privados diferentes se disparan los gastos, a tal punto que el kit de cinco luminarias en total costó $2 mil 046 millones 315 mil 136 pesos.

En principio sólo se hablaba del convenio interadministrativo 108, entre Essmar y EMP, el llamado ‘yo con yo’, cuyo objeto solamente contemplaba el alquiler de las luces y figuras, por un valor de $139 millones 186 mil 776 pesos, con unas cláusulas que suponían la responsabilidad del contratante en el evento de presentarse daños en el material. Lo llamativo es que dicho contrato no observa la logística, transporte, montaje, puesta en marcha y mantenimiento de las luces, obligando a un gasto adicional.

En este primer proceso contractual, un innegable círculo redondo, donde el más favorecido, sin duda, fue las Empresas Públicas de Medellín (EPM), multinacional que por orden de la Superintendencia Nacional de Servicios Públicos desde octubre gerencia la entidad distrital sin ningún compromiso de inversión, pero sí de aprovechamiento económico.

Ante este escenario, aparece un segundo contratista a quien por $1.773 millones, tendrá la tarea de prestar el servicio logístico de los equipos requeridos y mano de obra para la puesta en marcha de dichas tareas.

El 30% de este valor fue cancelado como anticipo y el 70% restante deberá ser depositado una vez cumpla con el 100% de las actividades convenidas y estas sean aceptadas por la Essmar.

El tercer privado que se pega al contrato tripartito, es la Empresa Regional de Servicios Públicos S.A E.S. P SEMSA E.S.P de Puerto Colombia, para el transporte, instalación y desmonte de los elementos, por un valor de $133 millones.

La justificación utilizada por la Essmar para este oneroso contrato fue la insuficiencia de la planta de personal. La Empresa de Servicios Públicos, “no cuenta con el personal suficiente y en especial con la experiencia, que puedan suplir el objeto a contar, por lo que en aras de desplegar un mejor desempeño y poder asumir con mayor fundamento y agilidad las metas propuestas; se hace necesario contratar una persona jurídica idónea, con experiencia en las actividades operativas”.

Según el tiempo máximo de ejecución del contrato, este es hasta el 31 de diciembre del presente año.

Para la comunidad de Santa Marta los valores antes descritos no se compaginan con el material puesto sobre los camellones de la Bahía y El Rodadero, y en las plazas Simón Bolívar, La Equidad y Gaira. “Mucho presupuesto para poco resultado”, aseguran los samarios.

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