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Sicario mató a tatuador de 5 balazos
Amedth Zair D'andreis Santamaría, de 36 años de edad, quien era tatuador, fue asesinado a balazos en la puerta de su casa.
La Policía señaló que el homicidio obedece a una pugna entre grupos delincuenciales.
En hechos que están siendo investigados por las unidades judiciales del comando de la Policía Metropolitana de Barranquilla, un hombre de oficio tatuador fue asesinado a balazos delante de su pequeña hija de seis años, quien también fue alcanzada por los proyectiles y resultó herida.
El homicidio se registró en el barrio Villa Concorde del municipio de Malambo, cuando la víctima, identificada como Amedth Zair D’andreis Santamaría, de 36 años de edad, se encontraba sentado junto a su primogénita en una moto que estaba parqueada en la puerta de su vivienda.
La institución policial dio a conocer que hasta el inmueble llegó un individuo a pie y después de detallar a D’andreis Santamaría, desenfundó un arma de fuego y sin mediar palabras le disparó en cinco oportunidades, la mayoría a la cabeza y en el tórax, lo que produjo su muerte de forma instantánea.
En el mismo acto sicarial resultó lesionada la hija de Amedth, cuyos proyectiles la afectaron en sus pómulos, tórax, antebrazo y hombro del lado izquierdo. Por lo anterior, fue socorrida por sus familiares, quienes se encargaron de llevarla en el menor tiempo posible hasta la Clínica Campbell, allí está bajo pronóstico reservado.
Entre tanto, Amedth quedó sobre su automotor, con su cuerpo inclinado boca abajo y todas sus prendas de vestir cubiertas de sangre producto de los múltiples balazos que le propinaron.
La Policía Metropolitana indicó a través de un comunicado que el homicidio obedece a una pugna entre grupos delincuenciales. “El ciudadano fallecido estaba cobijado con medida de aseguramiento con el beneficio de detención domiciliaria y registra una anotación por el delito de homicidio, una por fabricación, tráfico o porte de armas de fuego, y una por daño en bien ajeno», indicaron.
Finalmente, unidades del laboratorio móvil de criminalística de la Policía Judicial adelantaron la inspección técnica del cadáver y una vez culminados los actos urgentes llevaron el cuerpo sin vida hasta la morgue del Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses.
