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Sicarios asesinaron a vigilante comunitario
Alex Alberto Ramírez Cantillo, de 46 años, el vigilante informal que murió luego de ser víctima de un atentado a bala en vía pública del sur de Ciénaga.
El hecho se registró en el barrio Obrero. Es el segundo ataque a bala perpetrado en menos de 72 horas en esta localidad, donde un hombre resultó herido en la madrugada del lunes.
Los móviles del homicidio de Alex Alberto Ramírez Cantillo, un hombre de 60 años que trabajaba como vigilante informal, son un misterio. Lo único confirmado por las autoridades del Tercer Distrito de la Policía Metropolitana de Santa Marta, es que la víctima realizaba sus actividades diarias cuando fue sorprendido por sus homicidas que abrieron fuego indiscriminadamente y le causaron la muerte de forma casi que instantánea en vía pública del sur de Ciénaga.
Las autoridades indicaron que el suceso criminal se registró en la calle 26 con carrera 18 del barrio Obrero; allí se encontraba la víctima quien se desempeñaba como sereno del sector donde también residía, y en ese momento realizaba un recorrido a pie, cuando fue sorprendido por dos sujetos a bordo de una motocicleta, y el que se transportaba como parrillero sacó un arma de fuego con la que le disparó en repetidas oportunidades, hasta dejarlo sobre el suelo casi que sin vida.
El sonido de las detonaciones alertó a los residentes y vecinos del hombre, quienes salieron de sus viviendas para conocer detalles de lo ocurrido, y cuando se acercaron hallaron el cuerpo del vigilante informal con manchas sangre, producto de los proyectiles.
Rápidamente la víctima fue auxiliada y trasladada en un vehículo hasta la sala de urgencias del Hospital San Cristóbal de Ciénaga, donde los galenos en turno confirmaron su deceso, producto de los balazos que recibió en diferentes partes de su cuerpo.
Al sitio llegaron los investigadores judiciales de la Policía Judicial, los cuales se encuentran indagando para saber las causas del crimen de Ramírez Cantillo, quien se encontraba laborando en el momento del crimen. Del mismo modo, trabajan para dar con el paradero de los criminales que se dieron a la huida con rumbo desconocido tras cometer el hecho de sangre.
Se conoció que la inspección técnica del cadáver estuvo a cargo de uniformados del CTI de la Fiscalía, quienes lo trasladaron a la morgue de Medicina Legal de esta localidad, donde le practicaron la necropsia la mañana de ayer, antes de ser retirado por sus familiares que adelantan los trámites de retiro. A su vez, las autoridades judiciales desplegaron una investigación para esclarecer este nuevo homicidio en la segunda ciudad más importante del Magdalena.
Según la Policía, Ramírez Cantillo, contaba con anotaciones por el delito de fuga de presos del año 2015; fabricación, tráfico y porte de armas de fuego en el 2013 y una más por inasistencia alimentaria el 8 de mayo de 2013, por lo que investigan si el crimen tendría relación con sus antecedentes judiciales.
