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Supersalud se ´amañó´ con el hospital y lo seguirá manejando
El órgano de control dijo que dos años no ha sido suficientes para ‘recomponer’ la ESE, por lo tanto el ´Julio Méndez Barrenche´ seguirá intervenido.
Denotando incompetencia, ineficiencia y sin resultados alentadores a la vista, la Superintendencia Nacional de Salud le anunció de manera folclórica a los samarios que dos años han sido insuficientes para solucionar los problemas del hospital ´Julio Méndez Barreneche´. Por lo tanto, lo seguirán administrando.
Y es que en estos dos años que han transcurrido poco o nada es lo que se sabe de lo que la Supersalud ha hecho por el rescate del hospital samario.
Pasaron 730 días desde que el superintendente de Salud, Fabio Aristizábal, llegó a Santa Marta y ordenó la intervención del Hospital Julio Méndez Barreneche, y ahora dos años después sin rubnor alguno le comunican a la sociedad que ese tiempo le resultó insuficiente a la entidad nacional para poner a ‘flote’ el centro asistencial por lo que ayer anunció que necesita más tiempo para ‘rescatarlo’, y por la vía administrativa amplió por doce meses más la intervención que hace sobre el centro asistencial.
La Superintendencia dijo que ello se hace con el fin de garantizar una adecuada prestación del servicio de salud a los usuarios y cumplir con las líneas de acción planteadas para su recuperación.
En la resolución 090 de este 10 de mayo, el Ministerio de Salud documenta el estado actual del proceso de intervención iniciado hace dos años, con base en el informe elaborado por el agente interventor y el concepto técnico de la Supersalud donde se hace el seguimiento y el monitoreo de los indicadores de gestión del hospital.
De acuerdo con la resolución, la prórroga de la intervención se autoriza hasta el 11 de mayo de 2023, “teniendo en cuenta los resultados y la necesidad de la continuidad de las acciones…periodo durante el cual la ESE deberá mantener y mejorar los indicadores mínimos de gestión del Plan de Acción en cada uno de los componentes”.
En el componente administrativo, por ejemplo, se destaca la ejecución de los recursos asignados por el Ministerio de Salud para la remodelación del octavo piso y los avances de mantenimiento preventivo y correctivo en infraestructura, sistemas de información y equipos de refrigeración, entre otros.
En el aspecto financiero, la resolución destaca avances como que el hospital viene cumpliendo con el giro de las obligaciones corrientes y que se encuentra al día con el pago de sus empleados de planta y contratistas.
Desde el inicio de la medida de intervención también se identificó facturación pendiente por radicar cercana a los 79.000 millones de pesos y se ha gestionado más del 90% de esa facturación.
La resolución del Ministerio hace referencia al concepto del revisor fiscal del hospital, que considera importante que se logre por lo menos el punto de equilibrio entre los ingresos operacionales, los costos y los gastos, y no depender de los otros ingresos y subvenciones.
En el tema jurídico se destaca que el total de los pasivos se encuentran totalmente depurados, incluidas las provisiones de los procesos jurídicos y sus saldos reflejan la realidad económica del hospital.
La resolución menciona que “se han recuperado títulos judiciales por valor de 1.223.971.326 millones de pesos y están pendientes por recuperar títulos por 6.456.717.245 millones de pesos”.
En temas asistenciales, se resalta la habilitación y reapertura de servicios de mediana y alta complejidad y de diversas especialidades que garantizan la atención en salud, así como Un capítulo especial es la ampliación de la capacidad instalada que pasó de 17 a 68 camas de Unidades de Cuidados Intensivos, y de camas de aislamiento que no existía y ahora se cuenta con 13, las cuales han sido fundamentales para la atención de los pacientes críticos durante la pandemia por Covid-19.
Finalmente, se menciona la adecuación y remodelación del servicio de Psiquiatría que desde enero de este año opera con todas sus áreas habilitadas.