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La magistrada de la Sala Especial de Instrucción de la Corte Suprema de Justicia Cristina Lombana no podrá seguir investigando al senador Álvaro Uribe Vélez por sus presuntos nexos con el Bloque Metro de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC).
El alto tribunal aceptó la recusación presentada por el senador Iván Cepeda contra la magistrada por supuestamente incurrir en un conflicto de intereses.
La Sala concluyó que la imparcialidad de la magistrada podría verse afectada hecho por el cual se tomó la decisión de apartarla de la investigación contra Uribe por presuntos nexos con los grupos paramilitares y los hechos que rodearon las masacres del Aro y La Granja, que se registraron cuando era gobernador de Antioquia.
En este caso, se reiteró que al ser parte de las Fuerzas Militares, la magistrada Lombana fue subordinada de Uribe cuando fue presidente de la República entre los años 2002-2010.
Uribe -concluyó la Sala- al ser el máximo jefe de las Fuerzas Militares como presidente- habría tenido mando directo sobre Lombana.
Bajo esta misma premisa, el alto tribunal le retiró a la togada las investigaciones que cursan contra Uribe por su presunta participación en la manipulación de testigos y soborno, así como otros dos casos por denuncias de injuria y calumnia presentadas por el exmagistrado auxiliar de la Corte, Iván Velásquez y el columnista Daniel Coronell.
El líder del Centro Democrático es investigado por presuntamente haber permitido el accionar de los paramilitares en la década de los noventa en el departamento de Antioquia.
En el caso de las masacres del Aro y La Granja (registradas en 1996 y 1997, respectivamente) el entonces mandatario departamental habría permitido su movilización y su accionar.
Igualmente, se le investiga por presuntamente haber favorecido la creación, financiación y expansión del Bloque Metro de las AUC. Por estos mismos hechos enfrenta un juicio penal su hermano, el ganadero Santiago Uribe Vélez.