Robert Farah regresa a las competencias

Según el documento de la ITF, publicado, el tenista demostró la manera en la que la boldenona encontrada en su organismo llegó allí y se determinó que «no tiene culpa ni hubo negligencia de su parte para violar la norma».

A través de un comunicado oficial, la Federación Internacional de Tenis (ITF) confirmó que Robert Farah no infringió ninguna norma antidopaje y le levantó la suspensión provisional impuesta el 21 de enero, por lo que podrá volver a competir de manera inmediata.

Desde comienzo de año se conoció que el tenista Robert Farah había presentado un analítico adverso por boldenona, un anabólico utilizado comunmente en la cría de ganado, mientras estaba en periodo de descanso en Cali, Valle del Cauca, el 17 de octubre de 2019. A raíz de eso, el colombiano recibió el 21 de enero de 2020 fue suspendido provisionalmente.

Según el documento de la ITF, publicado, el tenista demostró la manera en la que la boldenona encontrada en su organismo llegó allí y se determinó que «no tiene culpa ni hubo negligencia de su parte para violar la norma», así que «la suspensión provisional del jugador se levanta con efecto inmediato. Para evitar dudas, el Sr. Farah es elegible para reanudar la competencia de inmediato».

Aunque se trata de una noticia favorable, la Federación añadió que si bien no hay sanción, sí queda en su registro que cometió una violación del programa antidopaje y que la decisión de retirarle la sanción está sujeta a la apelación de la WADA (Asociación Mundial Antidopaje) y el Ministerio del Deporte ante la Corte de Arbitraje Deportivo.

Central, la firma de abogados deportivos que asumió el caso de Farah, también emitió un comunicado en el que replicaron las primeras declaraciones del tenista tras conocer la decisión: «quisiera agradecer a mi familia, a mi amigo y compañero ‘Sebas’ (Cabal), mi equipo de trabajo, a Colsanitas, Mizuno, Hublot, Peugeot y Babolat, y a todos mis amigos y fans en Colombia y el mundo que me apoyaron siempre, especialmente durante este tiempo tan desgastante en donde debí probar mi inocencia».