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Fuertes reclamos recibió el gobierno en medio del encuentro que sostuvo el presidente Gustavo Petro y todo su gabinete en la presentación del pacto social por la paz de Catatumbo realizado este jueves en Tibú, Norte de Santander.
Tanta fue la molestia de la población por el abandono estatal del gobierno que varios asistentes interrumpieron la agenda programada para reclamar al presidente por acciones ante los múltiples problemas que persisten en la región.
Inicialmente, un representante del Comité de integración Social del Catatumbo (CISCA), tomó el micrófono y le dijo a Petro que no necesitaba decretar un estado de conmoción para actuar en esta zona olvidada por el estado.
“El pacto social por el Catatumbo no requiere de un estado de conmoción interior para implementarse y no necesita del estado de conmoción para desarrollarse, porque lo que necesita y requiere es que se comprometan vigencias futuras para que puedan en 8-11 años puedan dar respuesta a las necesidades estructurales y el abandono estatal que ha vivido esta región”, señaló.
El representante del CISCA le recriminó a Petro en Tibú que “Sus palabras, señor presidente, nos ponen en la mira de los diversos actores, que son los responsables de las amenazas. Sus palabras ponen en evidente riesgo nuestra seguridad, nuestra libertad. En sus manos dejamos nuestras vidas”.
El evento que intentó continuar con las declaraciones de otros representantes y funcionarios que firmarían el decreto del estado de conmoción interior en el Catatumbo fue interrumpido en varias oportunidades por la población asistente que mostraba su indignación por la violencia y el olvido que viven.
“El Catatumbo necesita en este momento el respaldo del gobierno y todas las entidades gubernamentales y que nos abracen con obras para el Catatumbo”, se escuchaba una voz de fondo, mientras se intentaba seguir con el cronograma.
Según señalaba el asistente indignado, la población requería urgentemente acciones en educación, salud, empleo, acueducto y “lo más importante que todos queremos en este Catatumbo que es la paz, señor presidente”. Además, reclamó que el “gobierno tiene que estar acá encima, no sentados en una oficina y el pueblo llevando del bulto”.
El asistente reclamó a Petro que se invierta más para la guerra y no para programas que beneficien a la comunidad del Catatumbo. “Queremos que verdaderamente las obras para el desarrollo de este pueblo sean con las mismas comunidades, esa plata que invierten en armas y en venirse a dar bala con los mismos del pueblo invirtámosla en los mismos militares y una ingeniería del mismo Ejercito venga a arreglar escuelas y arreglar las vías”.
Los encargados de la dirección del encuentro pedían a la comunidad que se dejará continuar con lo que se tenía organizado en las declaraciones, no obstante, más y más asistentes alzaban su voz para ser escuchados.
Mientras el presidente, la directora del Dapre, Angie Rodríguez y los gobernadores hablaban entre ellos preguntándose y qué hacer, se aumentaba el nivel de varias voces de los asistentes que gritaban de fondo más acciones del gobierno.
“Tenemos 56 mil catatumberos desplazados, tenemos 70 muertos en este momento en la región. Se están haciendo una verificación, pero la gente con susto y con miedo no denuncia”, reclamó otro asistente.
Y agregó que “hoy quienes confiamos en el proceso de paz total estamos siendo perseguidos y estigmatizados, hay un puñado de organizaciones que nos están asesinando nuestras bases. En estos momentos tenemos compañeros confinados, secuestrados y retenidos. Es inaudito que no se diga la verdad”.
El asistente reclamó a Petro que “hay situaciones que desconoce la realidad de fondo en el Catatumbo, que hay permeada dentro de sus ministerios y dentro de sus funcionarios” y pidió soluciones y retornos seguros a los miles de afectados desplazados, confinados y amenazados por culpa de la crisis humanitaria que se vive en el Catatumbo.
/Colprensa