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Comerciante samario fue el hombre hallado sin vida en El Curval
Los ajuste de cuentas, venganzas personales y disputa de territorio por el control de venta de drogas siguen generando una ‘ola’ de asesinatos en Santa Marta que tiene en alerta a la Policía Nacional.
Ayer en horas de la tarde, el cuerpo de un hombre fue hallado sin vida en una trocha del corregimiento de Bonda, área rural de la ciudad.
La víctima que vestía un jean color azul, camisa a rayas, y bóxer color gris, fue identificada como Carlos Arturo Marulanda Pinto, un comerciante de 52 años, oriundo de Santa Marta, quien había llegado hace unos días desde la ciudad de Medellín a cerrar un negocio. Su vehículo no fue encontrado en la escena.
El hallazgo se dio a las 2:45 p.m., en la trocha que comunica hacia la vereda Matogiro, en el sector de El Curval, momentos en un labriego que se dirigía a su parcela pasó por la zona boscosa y desolada, logrando divisar el cuerpo boca arriba con manchas de sangre en su vestimenta.
Las primeras versiones dan cuenta que la víctima fue inicialmente torturada, luego le dispararon en varias oportunidades y finalmente lo abandonaron en la zona donde fue encontrado con golpes en el rostro y heridas de arma de fuego en el pecho y la cabeza.
De inmediato, el hombre tomó su dispositivo móvil y llamó a la línea de emergencia de la Policía Nacional para dar aviso. La institución de inmediato desplegó un componente de uniformados hacia la zona a realizar las verificaciones del acto criminal, quienes después de inspeccionar el lugar, hallaron el cadáver, que según los peritos, registraba signos de violencia.
Funcionarios de la unidad móvil de criminalística de la Seccional de Investigación Criminal – Sijín – de la Policía se encargaron de adelantar la inspección técnica del cadáver y una vez culminaron los actos urgentes llevaron el mismo hasta la morgue del Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses.
Cabe mencionar que en esta misma zona, el domingo 26 de enero, José Luis Ropero de la Hoz, conocido como ‘El Niño’ o ‘El Mono’, fue hallado sin vida exactamente en la trocha que comunica con la vereda El Curval. La víctima atada de manos y con varios impactos de bala en la cabeza, tenía un cartel con la frase: “Atentamente, ‘La Muerte’” una “fachada” de las Autodefensas Conquistadoras de la Sierra Nevada.
