500 años de la Capitulación dada a Bastidas para fundar a Santa Marta

“El hecho de que la fundación de ciudades se haga ‘por encargo’ supone la institucionalización del urbanismo como plan civilizatorio”, afirma el secretario general de la Federación de Asociaciones Hispanistas, José Jiménez Galindo.

Ayer 6 de noviembre se celebraron 500 años de la firma de la Capitulación mediante la cual el Emperador Carlos I en Valladolid autorizó al sevillano Rodrigo de Bastidas para que fundara la ciudad de Santa Marta.

Lo anterior convierte a la ciudad en la más antigua fundada oficialmente por la Monarquía Hispánica en territorio continental de Suramérica teniendo en cuenta el protocolo de la monarquía española para el poblamiento.

Por esa razón la Alcaldía Distrital de Santa Marta realizó en ese día el conversatorio “500 años: entrega oficial de la Cédula Real de la Fundación de Santa Marta a Rodrigo de Bastidas”, evento que se cumplió anoche en la Sala Alterna del emblemático Teatro Santa Marta.

En palabras de José Francisco Jiménez Galindo, secretario general de la Federación de Asociaciones Hispanistas (FEAH): “la fecha de la capitulación del seis de noviembre de 2024 para la fundación de Santa Marta resulta lo suficientemente significativa para considerar su celebración porque ayuda a reforzar la identidad y dignidad de su ciudadanía”, indicó.

Jiménez Galindo sugiere una reflexión particular sobre la magnitud del hecho civilizatorio llevado a cabo por España y afirma que el mayor plan urbanístico de la humanidad fue el desarrollado por España en Suramérica.

“El hecho de que la fundación de ciudades se haga ‘por encargo’ supone la institucionalización del urbanismo como plan civilizatorio. La orden de la fundación de Santa Marta el 6 de noviembre, hace 500 años, trasciende la lógica ejecución de lo mandado con la fundación de Santa Marta el 29 de julio de 1525 por los considerandos que enumero a continuación y otros que seguro escapan a mi conocimiento de la inabarcable hispanidad.

1-Fue objetivo de la Corona Española la agrupación de “almas” en ciudades. La evangelización, principal objetivo de la Corona Española requería la fundación de ciudades. El hecho civilizador y culturizante de una sociedad va ligado a la fundación de ciudades. Las sociedades tribales resultan ser en su mayor parte trashumantes sin ligazón con el territorio. La sedentarización y agrupación de la población en ciudades dio como resultado la creación de instituciones de todo tipo y con ellas la organización eficiente de tareas.

2-La fundación de ciudades hispanas requería la selección del territorio ideal. Si las ciudades medievales devenían de la necesidad de protección y su entramado caótico de su carencia de planificación, Santa Marta se construye sobre un territorio estudiado y seleccionado por su fundador Rodrigo de Bastidas en 1519, premeditada, planificada, evaluado el proyecto y autorizado por el Emperador un 6 de noviembre hace 500 años.

3-El urbanismo español en América responde a un modelo clásico. El modelo hipodámico como modelo de urbanización novohispana. Santa Marta presenta un entramado hipodámico de calles en damero perfectamente orientadas con el fin de que la sinergia con los vientos locales contribuya a la salubridad del municipio. Sí, la primera ciudad de la Corona de España en América sigue un modelo de ciudad ideal, como Cisneros buscó crear en Alcalá de Henares con su modelo de Civitas Dei. Luego vinieron muchas más como Cartagena de Indias, Panamá, Lima y otras.

4-La urbanización de América por España se realiza de manera planificada. La urbanización colonial de la América hispana presenta un caso de culturización de un territorio coincidente con el uso de un modelo morfológico urbanístico único en un gran número de fundaciones.

“En el caso de Santa Marta, y como me apunta Álvaro Ospino Valiente, presidente de la Academia de Historia del Magdalena, las manzanas se organizaron con el eje mayor en sentido norte-sur en el que se dispusieron las fachadas principales y las fachadas este-oeste, más expuestas a los rigores del calor quedaron protegidas por calles más estrechas que permiten el sombreado producido por la construcción enfrentada. Esta disposición favorecía también la ventilación de las fachadas principales dado que los vientos predominantes en la zona soplan del noreste. Todo un ejemplo de planificación urbanística cuya observación e interpretación constituye uno de los atractivos de la ciudad. La excelencia buscada desde la planificación”, puntualizó José Francisco Jiménez.