Samarios honran con su fe a la Virgen del Carmen

Los fieles devotos de la Virgen del Carmen en Santa Marta se congregaron desde muy temprano en las parroquias para participar de la santa Eucaristía en honor a la santa patrona muy querida en esta ciudad y en toda la región Caribe colombiana.
Una de las parroquias que abrió temprano sus puertas fue la de Nuestra Señora del Carmen en el barrio Pescaíto, rindiendo así honores a su santa patrona.
En este sagrado templo, la solemne Eucaristía fue presidida por el Obispo de la Diócesis de Santa Marta, monseñor José Mario Bacci Trespalacios con el acompañamiento del párroco Francisco Ortega Fernández.
Y la invitación que hicieron estos representantes de la Iglesia Católica es dedicarnos a “escuchar”, prestar atención, acoger la Palabra del Santo Evangelio, y tener disponibilidad hacia Dios. Así como lo hizo María en sus diferentes advocaciones en este caso Nuestra Señora del Carmen, que siempre ha estado atenta a Dios.
Monseñor José Mario Bacci tiene un inmenso amor a esta advocación mariana, que desde pequeño aprendió de sus padres, y a ella recurre para que interceda por la Etapa de la Escucha, momento previo al discernimiento que nos llevará a la decisión, para caminar sinodalmente con el Plan Pastoral Diocesano.
Durante esta importante celebración religiosa se oró ante la Virgen para que interceda por la Diócesis de Santa Marta, en Etapa de Escucha, al igual que su bendición para monseñor José Mario Bacci Trespalacios, a todos los sacerdotes, seminaristas, laicos, agentes de evangelización, movimientos apostólicos, parroquias y a todos los feligreses católicos.
En la santa Eucaristía se vieron a muchos fieles devotos llevar la imagen de la Virgen del Carmen para que fuera bendecida como es la tradición.
La devoción a la Virgen del Carmen hace referencia, también, al escapulario, ese pequeño signo que nos recuerda nuestra filiación, nuestra consagración bautismal y el compromiso de vida cristiana que supone imitar a María, perfecto modelo de entrega a Dios e intercesora nuestra.
Además, la devoción a Nuestra Señora del Carmen está muy vinculada con el mundo del mar, por ello, en Santa Marta la honran mucho y le imploran de que sea una guía y protectora de la comunidad.
La devoción carmelitana, como todas las devociones marianas, cuando es vivida rectamente y con autenticidad, no nos distrae de nuestros compromisos de vida cristiana o eclesiales, sino todo lo contrario, nos lleva al corazón del Evangelio.