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Hoy estarán en ascuas varios congresistas, ministros y funcionarios del alto Gobierno. Olmedo López asistirá a la Fiscalía igual que su exsubdirector de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres, Sneyder Pinilla. Allí, ambos ampliarán su primera declaración para tratar de conseguir un principio de oportunidad que les garantice inmunidad total, a cambio de hacer la delación por corrupción más grande de los últimos años en Colombia.
Ni el escándalo de Odebrecht habría puesto a tantos funcionarios del alto Gobierno, ministros y congresistas en riesgo. López y Pinilla aseguran tener información sobre un mecanismo de corrupción que consolidaría unos 380.000 millones de pesos de contratos de la Unidad puestos al servicio de congresistas, directores de departamento y ministros, en los que todos estos habrían sacado tajada para dos cosas: uno, promover la agenda de reformas y proyectos del Gobierno en el Congreso; dos, financiar la campaña de las elecciones locales en octubre de 2023, una gran apuesta del Gobierno que terminó con resultados negativos para el mandatario. Estos son las siete denuncias más reveladores de Olmedo López, y lo que podría venir tras su cita hoy con la Fiscalía.
En la entrevista que López le dio a Noticias RCN dijo que el ministro Luis Fernando Velasco tiene muchas cosas que explicar y una de ellas es la del maletín con dinero en efectivo que fue encontrado en la sala en la que se realizan los Puestos de Mando Unificado (PMU) cuando Velasco estuvo a cargo de la entidad en abril de 2023. El maletín perteneció al fugaz exsubdirector Enrique Vargas Vega y nunca se aclaró la cantidad de dinero que el funcionario olvidó cuando salía a almorzar. Su versión es que eran 5 millones de pesos, pero en su momento se habló de 500 millones sin que se definiera la cantidad por parte del involucrado. Tampoco quedó claro por qué Vargas tenía tanto dinero en efectivo en su maletín personal.
López acusó a Velasco directamente de hacer parte de un “cónclave” en el que supuestamente se coordinó la entrega de dineros para la corrupción política con los contratos de la UNIDAD. En entrevista con Blu Radio, este dijo además que el ministro le envió un mensaje ayer en el que lo llamó sicario por la andanada de acusaciones.
LOS $4.000 MILLONES A CALLE Y NAME
El segundo hito del ‘Olmedogate’ pasa por las acusaciones tanto de López como de Pinilla que señalan a Iván Name, presidente del Senado, y Andrés Calle, presidente de la Cámara, de haber recibido 3.000 y 1.000 millones de pesos respectivamente.
Aunque ambos lo han negado, hay que recordar que tanto Name como Calle tenían intereses profundos en la campaña de octubre de 2023 mientras se ejecutaba el contrato de los 40.000 millones de
López dice que tiene cómo probar que altos funcionarios del Gobierno y ministros le dieron esa instrucción para entregarles a ambos congresistas el dinero en efectivo.
De esos señalamientos hay chats en los que Pinilla acuerda una reunión “reservada” en el apartamento de Calle en Montería y Sandra Ortiz concreta verse en una habitación del Hotel Tequendama en Bogotá con López. Supuestamente Ortiz, exconsejera presidencial para las regiones, era la mensajera de Name.
LA ACUSACIÓN EN CONTRA DE WADITH MANZUR
El último congresista mencionado hasta ahora es Wadith Manzur, conservador también de Córdoba que viene de una familia política tradicional en la región y tiene un cargo de enorme poder en el Congreso; es el presidente de la Comisión de Acusaciones de la Cámara y actualmente es uno de los representantes con la misión de investigar la financiación de la campaña de Gustavo Petro. Por sus manos tendría que pasar la posibilidad de un juicio político contra el presidente que iría a plenaria, tras el envío del expediente del Consejo Nacional Electoral que pide sanciones administrativas contra los responsables de la campaña por gastos no reportados.
Manzur también estaba haciendo campaña en Córdoba para octubre pasado de la mano de Erasmo Zuleta, quien ganó la Gobernación. Olmedo López dijo que el congresista “se dejó comprar o se vendió” y que “resultó beneficiado con contratos de la Unidad”. Este respondió denunciando a López por calumnia agravada y dijo que nada de lo que dice el exdirector es verdad.
EL CÓNCLAVE DE LA CASA DE NARIÑO
López también empezó a hablar durante los últimos días de la existencia de un cónclave de alrededor de cinco altos funcionarios entre ministros y directores de departamento de Presidencia en el que se tomaban las decisiones para ordenar la entrega del dinero en efectivo.
Es claro que de ese cónclave harían parte Carlos Ramón González, sobre el que le preguntaron reiteradamente a Olmedo y este no lo negó, y el ministro Luis Fernando Velasco. González era para entonces el director del Departamento Administrativo de la Presidencia ; hoy es nada más y nada menos que la cabeza de la Dirección Nacional de Inteligencia y no hay certeza sobre el alcance de su trabajo.
De otro lado, se conoció que Laura Sarabia no va a ser incluida en la propuesta de matriz de colaboración para conseguir el principio de oportunidad porque López “no tiene información sobre ella”, dijeron fuentes relacionadas con la historia.
Así las cosas, todavía quedan pendientes tres nombres del curubito de poder de Palacio que estarían implicados en ese grupo encargado de dar las instrucciones para la corrupción. Preguntado sobre si tuvo algo que ver con las reuniones, el actual magistrado de la Corte Constitucional, Vladimir Fernández, quien para la época era el secretario jurídico de Casa de Nariño, dijo que no sabe nada al respecto.
SE ROBARON 380.000 MILLONES PARA LA AGENDA DEL GOBIERNO
La información sobre la corrupción en la UNGRD hasta ahora se centralizaba en el contrato para los carrotanques que esta entidad ordenó por 40.000 millones de pesos y que resultó siendo un fracaso en su propósito de llevar agua potable a comunidades indígenas en condición de vulnerabilidad en La Guajira.
El contrato, con sobrecostos probados hasta ahora por alrededor de 7.000 millones según las cuentas de la Contraloría, fue entregado al contratista Luis Eduardo López Rosero que tercerizó la compra a la empresa de Medellín, Kenworth de la Montaña. Cada carrotanque fue comprado en alrededor de 600 millones pero facturado a la UNGRD en 1.200 millones. Y todo esto ocurrió en los días previos a las elecciones del 29 de octubre.
Pero López dijo que lo de los carrotanques era la punta del iceberg y en su última declaración en RCN habló de 380.000 millones de pesos comprometidos para la agenda del Gobierno a congresistas y políticos, de los cuales 200.000 millones eran para el manejo exclusivo de una persona cuyo nombre aún no se conoce.
LAS FECHAS COINCIDEN
Finalmente, otro dato que resulta revelador es la coincidencia de las fechas de los debates más importantes para la reforma a la salud versus los desembolsos de proyectos significativos de la UNGRD.
Un documento en poder de este medio señala bien que en las semanas determinantes para la aprobación de la reforma tanto en la Comisión Séptima como en la plenaria de la Cámara, en donde, entre otras, Manzur y algunos conservadores hicieron quórum para varias sesiones, la Unidad hizo giros por más de 85.000 millones de pesos.
Si bien el escándalo ya lleva semanas de haber estallado, cada día que pasa sorprende por las nuevas revelaciones de los dos testigos que fueron altos funcionarios del Ejecutivo y ahora son sus más implacables delatores.
De la relevancia de los hechos, la capacidad para probarlos y los nombres de superiores que López y Pinilla expongan, depende que la Fiscalía, hasta ahora lenta en sus decisiones frente al caso, les otorgue o no el principio de oportunidad.
Los chats revelados dan cuenta de que tienen información poderosa y el impacto en el Gobierno ha sido notorio. Lo que está en juego para el presidente Petro es la coherencia y legitimidad de su bandera anticorrupción./colprensa