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Los gobernadores del país no llegaron a la Convención Bancaria a pedir créditos ni perdón a las deudas de sus regiones. El clamor unánime fue por rescatar la seguridad ciudadana, a que impere el orden y la ley. También hablaron de las reformas sociales del Gobierno, con énfasis en la salud y la propuesta del Gobierno de economía popular.
Los mandatarios de Meta, Nariño, Sucre y Cundinamarca participaron ayer en el conversatorio ‘La voz de las Regiones’ en desarrollo de la Convención Bancaria que se desarrolla en Cartagena y el panorama que describieron en sus regiones es preocupante.
“Apoyamos la paz total, pero con seguridad total”. Con esa frase del gobernador del Meta, Juan Guillermo Zuluaga, abrió el diálogo ante los banqueros del país. “No queremos un Estado solo generoso con los grupos armados, lo queremos firme, para evitar que los violentos sigan creciendo en el país”, precisó el mandatario llanero.
“Esto va por mal camino. La seguridad no es opción del Presidente, es un anhelo de los colombianos. No es que el Eln haga lo que quiera”: Juan Guillermo Zuluaga, gobernador del Meta.
Para describir el panorama de seguridad de su departamento, Zuluaga señaló: “allí se pasean como Pedro por su casa los violentos con extorsión y amenazas, pero advirtió que “el Gobierno no nos para bolas”, mientras crecen los violentos.
El mandatario de Nariño, Jhon Alexander Rojas Cabrera, recordó que después del Acuerdo de Paz – con las Farc- su departamento vivió un año de paz, pero al no implementarse ese acuerdo 13 grupos al margen de la ley se tomaron el territorio dejado por esa guerrilla, porque el Estado nunca llegó a copar esos espacios. “En Nariño hay dos economías ilícitas: la de los cultivos ilegales y la minería ilegal”, que son un caldo de cultivo para los violentos. “Se requiere la suspensión de toda actividad ilícita”, señaló.
El mandatario de Sucre, Héctor Olimpo Espinosa Olivero, también expuso la situación de su departamento: “La situación de Sucre no es distinta a la de otras regiones. La criminalidad no tiene límite e impera la minería ilegal y el narcotráfico”.
“No nos estamos enfocando en el verdadero problema que es el narcotráfico. Nos hemos equivocado en pensar que la erradicación de los cultivos debe ser voluntaria y hoy hay más cultivos ilícitos y más drogas que 13 años atrás. Con esa situación no hay proceso de paz sostenible”, expresó el mandatario sucreño.
Los casos de crímenes en ese departamento pasaron de 82 en 2021 a 224 el año pasado y en lo corrido de 2023 ya van 164. “La generosidad del Gobierno en la construcción de paz la están mal utilizando los actores armados”, dijo.
“Esto va por mal camino. La seguridad no es opción del Presidente, es un anhelo de los colombianos. No es que el Eln haga lo que quiera”, replicó el gobernador del Meta.
No nos estamos enfocando en el verdadero problema que es el narcotráfico. Nos hemos equivocado en pensar que la erradicación de los cultivos debe ser voluntaria y hoy hay más cultivos ilícitos y más drogas que 13 años atrás. Con esa situación no hay proceso de paz sostenible”:
Héctor Olimpo Espinosa Olivero, gobernador de Sucre.
El gobernador de Cundinamarca, Nicolás García Bustos, cuya región tiene un panorama de seguridad distinto, dijo que su departamento es solidario con las demás regiones, porque la seguridad es de todos, al tiempo que alertó sobre el riesgo de que antiguos corredores para el secuestro se reactiven entre su departamento y el Meta, como en el pasado.
Los gobernadores también señalaron que en sus jurisdicciones hay alcaldes amenazados, comunidades amenazadas, familias amenazadas, grupos que intimidan y candidatos a las alcaldías que tienen zonas vedadas y ante esto se requiere que actuemos entre todos y ya; o de lo contrario este monstruo de mil cabezas nos llevará a otra guerra de 50 años, concluyó el mandatario llanero.