El Rodadero está ‘invadido’ por los habitantes de calle 

La comunidad denuncia que semana a semana va en crecimiento este problema generando inseguridad y una mala imagen del destino turístico.  

Hoy el balneario de El Rodadero presenta un panorama deprimente, que muestra el abandono oficial y privado. Un lugar condenado a vivir su propia suerte, muy a pesar de lo valioso que resulta para el destino desde el punto de vista turístico.

Hoy el balneario que siempre ha sido referente en materia de turismo en el Caribe y en Colombia en general, atraviesa la peor de sus crisis con problemáticas que pese al constante clamor de los habitantes y comerciantes, no son atendidas.

Desde que una persona arriba al balneario de El Rodadero, evidencia situaciones sociales no gratas. Una de las más preocupantes obedece a la mendicidad y sobrepoblación de habitantes en condición de calle, quienes han ocupado todas las zonas del que fuera un exclusivo sector de Santa Marta, generando un completo desorden e inseguridad en el sector de mayor concurrencia de turistas de la ciudad.

Aurelio Rosales Durán, presidente de la Junta de Acción Comunal (JAC) de El Rodadero afirmó que “este es un tema de abandono por parte de la Comisión Pública. Acá cuestionamos mucho a la Alcaldía, porque fíjese que existe Promoción Social, Secretaría de Seguridad, Secretaría de Gobierno, pero no hacen nada al respecto, nosotros hemos hecho varias reuniones y no se logró nada. La percepción que tenemos los que vivimos acá es que hay un abandono total hacia El Rodadero”.

Antes, el sector de mayor presencia de habitantes de calle era la carrera primera, hoy estas personas de diferentes nacionalidades, incluso de algunos resguardos indígenas, merodean por todos lados.

“Este problema es cada vez más crítico. Casi que diariamente vemos habitantes de calle nuevos, lo que nos hace pensar que los que corren de otros lados los traen para acá. En todas las esquinas ves a una persona o un grupo pidiendo plata y lo más triste es que incluso usan a los niños para esto”, indicó Karina Mendoza, habitante de El Rodadero.

Las fachadas de las edificaciones y establecimientos comerciales que se encuentran en la zona, se han convertido en los hogares de paso de los indigentes que deambulan por todas las calles, ocasionando en algunos casos daños de la infraestructura y hurtos de elementos como los bombillos

“Acá se roban las cosas, convierten las esquinas en baños públicos. Todo esto deteriora la imagen de El Rodadero, ya este sector no es ni sombra de lo que era hace 10 años y esto obedece a la misma permisividad de la administración”, expuso el presidente de la JAC.

Al utilizar estas personas cualquier andén o esquina como baño público, la comunidad teme que este tipo de actos desencadene una problemática de salud, puesto que presuntamente son portadores de enfermedades que no han sido tratadas.

“Hemos visto personas desplomarse, escupir sangre, y sinceramente eso nos preocupa, porque no sabemos qué tipo de enfermedades tienen y la comunidad sigue haciendo uso de esas mismas calles, expuestos a cualquier cosa”, agregó Celmira Buelvas, habitante de El Rodadero.

Asimismo, un morador del sector, quien prefirió no dar su nombre por razones de seguridad, afirmó que la problemática va más allá de la situación de indigencia, afirma, que una de las razones es que presuntamente en El Rodadero estarían operando ‘Ollas’ de microtráfico.

“Son cuatro ollas de vicio en la Zona Norte, Puente Ibiza, en el sector de Techo Verde, Calle 6 y 7 de mañana y noche, esto ha hecho que estos muchachos se hayan instalado en el sector de El Rodadero porque ven con facilidad comprar el estupefaciente cerca”, expresó el ciudadano.

Es preciso señalar que, durante este domingo se pudo percibir que desde la Alcaldía de Santa Marta, a través de la Secretaría de Promoción Social se realizaron labores de caracterización de esta población, para así posteriormente ejecutar las acciones pertinentes, teniendo en cuenta que según un funcionario de esta cartera que ejecutaba dicha actividad, ya está aprobado un albergue para estas personas.

Así las cosas, los habitantes de El Rodadero piden una vez más que se ejecuten intervenciones interinstitucionales al igual que se han ejecutado en zonas como el Centro Histórico, para así poder recobrar la tranquilidad y armonía que caracterizó por muchos años a este sector de la capital del Magdalena.