Noticias de Santa Marta, el Magdalena, y el mundo!
Papa Francisco no asistió al Viacrucis nocturno
El Papa Francisco, que estuvo hospitalizado la semana pasada por una bronquitis, canceló su presencia en el Viacrucis nocturno de este viernes en el Coliseo de Roma, debido a las bajas temperaturas que se registran en la capital italiana, indicó el Vaticano.
«Debido al intenso frío de estos días, el Papa Francisco siguió el Viacrucis desde su residencia de Santa Marta (en el Vaticano, ndr)», informó en una nota el Vaticano.
La decisión fue tomada para proteger la salud del pontífice, debido a que el Vía Crucis es nocturno y se lleva a cabo al aire libre ante el célebre monumento romano con la asistencia de fieles y turistas de todo el mundo.
Una ola de frío inusual para este período del año azota la capital romana desde hace unos días, con temperaturas que no superan los 10°C por la noche.
El Santo Padre, de 86 años, presidió en cambio la misa que se celebra pocas horas antes en la basílica de San Pedro.
Desde su elección en 2013, el Papa Francisco ha participado en el Vía Crucis de Roma, un momento culminante de la Semana Santa, que conmemora la muerte de Cristo, según el relato de los Evangelios.
Organizado desde 1964 en el anfiteatro romano, especialmente iluminado para la ocasión, el Vía Crucis dejó de ser celebrado en ese lugar sólo en 2020 y 2021 a causa de la pandemia de coronavirus.
Jorge Mario Bergoglio, que tiene problemas de salud y utiliza una silla de ruedas para desplazarse debido a los dolores en una rodilla, estuvo hospitalizado durante tres días la semana pasada en Roma con una bronquitis infecciosa, lo que avivó las especulaciones sobre su posible renuncia.
Desde que fue dado de alta el sábado del hospital ha participado en varias ceremonias públicas en el Vaticano, entre ellas la misa del Domingo de Ramos y la audiencia general semanal del miércoles.
El jueves lavó los pies de 12 jóvenes detenidos en una prisión de Roma para practicar allí el tradicional rito del lavatorio de pies a marginados.
Este domingo debe presidir la Misa de Pascua en la plaza de San Pedro e impartir la tradicional bendición «Urbi et Orbi» (a la ciudad y el mundo) además de leer el tradicional mensaje sobre los problemas del mundo.
EL JUEVES SANTO
El Papa Francisco lavó los pies a doce jóvenes detenidos de una cárcel de menores de Roma, al cumplir con los ritos de Jueves Santo pese a sus recientes achaques de salud.
Conforme a la tradición cristiana, Francisco representó el gesto de humildad que tuvo Cristo con sus apóstoles antes de ser arrestado, condenado a muerte y crucificado un viernes en Jerusalén.
El pontífice argentino, de 86 años, que fue hospitalizado la semana pasada por una bronquitis desatando preocupación entre los católicos, acudió este jueves por la tarde a la prisión de Casal del Marmo, en el norte de la capital italiana, donde ya había realizado ese rito en 2013 tras su elección al trono de Pedro.
Apoyado en un bastón, Jorge Mario Bergoglio, apareció sonriente y se paró frente a cada uno de los 12 jóvenes detenidos -entre ellos dos chicas- para lavarles los pies e incluso se agachó para besarlos.
Algunos de ellos le devolvieron el gesto con un beso en la mano, otros intercambiaron algunas palabras con él.
«Voy a cumplir con este ritual. No es folclor. Espero salir de esta porque no puedo caminar muy bien», explicó el Papa, que estuvo varios minutos de pie, en alusión a sus problemas para caminar por los dolores en una rodilla que lo obligan a moverse en silla de ruedas.
Entre los jóvenes había incluso un musulmán, además de católicos de varias partes del mundo, según precisó el Vaticano, que transmitió por primera vez en directo la ceremonia.
Desde el inicio de su pontificado en 2013, el Papa Francisco decidió llevar esta celebración fuera del Vaticano.
El jueves por la mañana, el Papa Francisco presidió en la basílica de San Pedro la tradicional misa crismal, en la que se bendice el aceite santo que servirá para otros sacramentos durante el año.
Este domingo, con ocasión de Pascua, que conmemora la Resurrección de Cristo según el relato de los Evangelios, impartirá la bendición «Urbi et Orbi», a la ciudad y al mundo, y leerá el tradicional mensaje sobre los problemas del mundo. /AFP