Feligreses rindieron homenaje póstumo al Papa Benedicto XVI

El Obispo de la Diócesis de Santa Marta, Monseñor José Mario Bacci Trespalacios, ofreció una misa por el fallecimiento del Pontífice número 265 en la historia de la Iglesia Católica. En el acto religioso asistieron creyentes de toda la ciudad y turistas.  

En la Catedral Basílica de Santa Marta, el Obispo diocesano, Monseñor José Mario Bacci Trespalacios, en compañía del clero y fieles de varias Parroquias de la ciudad, participaron de una misa en sufragio por el deceso del Papa alemán, Benedicto XVI, cuya fotografía estaba al pie del presbiterio del altar mayor, acompañando por una estola y una mitra, que simbolizan el trabajo que desempeñó como titular sede petrina hasta marzo del 2013.

Bacci Trespalacios expresó que, como iglesia particular, “elevamos nuestra acción de gracias al Señor por este profeta de nuestro tiempo, hombre de fe y de oración, de profundas convicciones y de probado servicio a la humanidad y a la Iglesia». El rito religioso tuvo lugar a las 12:00 del mediodía de este jueves, con extensa participación de creyentes extranjeros.

“El Papa Benedicto XVI deja un gran legado a la humanidad por su testimonio, en una trayectoria ampliamente conocida, que revela un camino continuo de maduración en la fe en Jesucristo, unas enseñanzas contenidas en amplios documentos publicados en varias lenguas que permiten a la humanidad contemporánea tener acceso al contenido de la fe y abrir la existencia con el encuentro con Cristo”, aseguró monseñor José Mario.

El jerarca diocesano, se refirió al Papa fallecido, como un «humilde servidor de la viña del Señor”, tal como se definió el día de su elección como pontífice de la Iglesia al reemplazar a Juan Pablo II. A su vez, recalcó su eficacia en su periodo papal, que lo llevó a grandes realizaciones para el bien de todos.

“Un gran teólogo que apreció siempre el diálogo entre la fe y la razón, y que desde esa perspectiva abrió horizontes nuevos a la reflexión teológica y a la práctica pastoral. Además, un legado importante es su presencia discreta pero eficaz como pontífice en el marco de la política mundial, era un hombre de gran objetividad, fineza y agudeza en el análisis de las situaciones y en la apertura de los horizontes de respuesta a los desafíos de la sociedad”, puntualizó Bacci.

La Catedral Basílica de Santa Marta fue una de las cinco mil parroquias en Colombia que convocó a los católicos para que, en ceremonias sobrias, pero con mucha solemnidad, homenajearan la vida y obra de Joseph Aloisius Ratzinger.

“Del Papa Emérito debemos revisar toda su herencia intelectual y producción académica, porque ciertamente encontraremos en sus intervenciones muchas luces para interpretar el tiempo presente y para reaccionar en modo adecuado a los grandes desafíos de hoy”, concluyó el Obispo de Santa Marta.

El acto litúrgico para la sepultura del Papa Emérito Benedicto XVI, se convirtió en uno de los eventos más novedosos de la historia moderna de la iglesia católica, dado que se trató de las exequias de un sumo pontífice que ya no era el titular de la sede romana.