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¡La ciudad no aguanta más el pésimo servicio de aseo!
No hay más alternativas. Todos los tiempos se vencieron, los incumplimientos fueron múltiples, pero lo peor es lo que viene sucediendo y es lo que Interaseo no puede tapar: el deprimente espectáculo que a diario nos entrega con el amontonamiento de basuras y desechos en las esquinas de la ciudad y en cuanto lugar tiene los contenedores, los que de paso no dan abasto y vemos como las bolsas de basuras permanecen por fuera de ellos hasta donde llegan animales en condición de calle a hurgar, lo mismo que personas migrantes en busca de alimentos.
Y es que para nadie es un secreto que la copa se rebosó. Ante las evidencias contundentes de que viene prestando un pésimo servicio de recolección de basuras, incumpliendo el contrato de concesión que durante años ha tenido con el Distrito de Santa Marta, y la manifiesta y abierta reticencia a cumplir con el último Pacto de Mejoramiento suscrito con la Alcaldía, tras haber colapsado los contenedores recipientes de los desechos que a diario producen los samarios; la administradora de la ciudad Virna Lizzi Jhonson Salcedo se apresta a dar por terminado el citado contrato.
Y es que de acuerdo con juristas y especialistas en medio ambiente y servicios públicos domiciliarios,. la administración distrital se ha tardado en decretar la caducidad del contrato cuando existen todos los elementos probatorios que respaldarían una determinación en tal sentido. ´Metroagua cometió menos pecados capitales que Interaseo, pero de igual manera perjudicó a la ciudad con un pésimo servicio, manteniendo un negocio con un evidente desequilibrio financiero para el Distrito y se le dio por terminado el contrato. En el caso de Interaseo, su situación es peor que la de la extinta Metroagua, opera pero no presta un buen servicio, ha mantenido el contrato por años y se considera intocable con el mismo, y es la oportunidad de que la administración se desprenda de esta concesión´, opinaron los abogados consultados.
LA SACA DEL ESTADIO
Pero lo que acaba de ocurrir es como para ripley. Interaseo es consciente y sabe perfectamente que la interventora del contrato de concesión es la empresa Essmar y así lo ha reconocido y aceptado en todas sus actuaciones administrativas. Pero ante la sospecha que sus incumplimientos no serán pasdos por alto y la empresa encargada de hacerle un minucioso seguimiento a la prestación del servicio se apresta a tomar decisiones, Interaseo ha iniciado una campaña de ´despretigio´ de esas determinaciones, cuando es consciente que existe esa interventoría, de las facultades de la misma y de lo que eventualmente podría enfrentar, tras su renuente posición de ofrecer un eficiente servicio de recolección de basuras a los samarios.
´No se entiende como esta empresa (Interaseo) ahora descalifica las actuaciones de Essmar, busca desconocer las facultades sancionarias que tiene en su condición de interventora del contrato, lo mismo que los alcances del Plan de Mejoramiento que a comienzos del año firmaron con la alcaldesa Virna Jhonson y el cual está demostrado que incumplieron´, dijo José Martínez, líder social y comunitario veedor de servicios públicos.
Luego anotó: ´Aquí estamos frente a dos puntos: o la Alcaldesa y la gerente de Essmar cumplen decretando la caducidad del contrato por el incumplimiento en que incurrió Interaseo, o ellas tendrán que responder por omisión y peculado por apropiación en fravor de terceros´, agregó el líder social.
Lo que llama la atención es la ofensiva jurídica que ha iniciado la empresa Interaseo, buscando desacreditar las actuaciones de la interventora del contrato para lo cual ha planteado que su defensa ataque las actuaciones administrativas derivadas del proceso sancionatorio que se inició.
Interaseo ha demostrado a través de los años que ha tenido el contrato de concesión, que se trata de un negocio rentable, que le ha dejado multimillonarias ganancias en detrimento de la ciudad y ahora que ha llegado el momento de hacer un corte de cuentas en vista de su incumplimiento emplea argucias y estrategias que apuntan a distraer la atención pública, cuando en esencia lo que la gente pide y reclama es la prestación de un buen servicio de recolección de basuras.