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Fernando Costa, dirigente del club Always Ready, fue electo como nuevo presidente de la Federación Boliviana de Fútbol (FBL) con la misión de reiniciar, cuanto antes, el campeonato local paralizado desde marzo pasado por la pandemia del Covid-19.
«Vamos a trabajar para que en el fútbol profesional la pelota retorne lo más pronto posible y para darle mayor estabilidad a la gestión de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF)», declaró el flamante presidente en rueda de prensa.
Costa recibió el apoyo unánime de los 21 dirigentes que asistieron al Congreso Ordinario de la FBF (ocho clubes de la División Profesional y 13 de la División Aficionados). Seis equipos profesionales se marginaron cuestionando la legalidad de la convocatoria.
«El congreso goza de total validez y se ha conformado el quórum (suficiente)», explicó el flamante presidente del fútbol boliviano.
Costa dirigirá las riendas de la FBF hasta el año 2022 completando el mandato del ex presidente federativo, César Salinas, fallecido en julio pasado por Covid-19.
Desde entonces se desataron pugnas dirigenciales en la FBF que llegaron hasta los estrados judiciales y derivaron el pasado jueves en la detención de Marco Rodríguez entonces presidente en ejercicio del fútbol boliviano, posteriormente liberado.
El nuevo mandamás del fútbol boliviano, de 50 años, tiene nacionalidad boliviano-argentina, y ganó notoriedad tras lograr en 2019 el ascenso de su equipo Always Ready a la División Profesional, después de 27 años, y su posterior clasificación a la Copa Sudamericana.
El Congreso determinó la expulsión de Robert Blanco, ex vicepresidente de la FBF, quien reclamaba para sí la presidencia del fútbol boliviano y por ello recurrió a la justicia ordinaria.
«Fue una decisión unánime del pleno y los que se vean implicados en actos similares van a ser (igualmente) sancionados», explicó Costa.
El Congreso determinó asimismo que este año no habrá descensos y que en 2021 la División Profesional contará con 16 clubes pues se ha previsto dos ascensos.
El torneo boliviano es el único que aún no se ha reanudado en Sudamérica a causa de la pandemia del coronavirus.
/AFP