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Todo está listo para que este martes la Fiscalía General presente el escrito de acusación en contra de Aida Victoria Merlano Manzanedo y el odontólogo, Javier Baraja Cely por su presunta participación y conocimiento en los hechos que rodearon el plan de fuga de la excongresista Aida Merlano, el pasado primero de octubre.
El ente investigador sostendrá que la joven de 20 años y el profesional de la salud tuvieron una activa participación en la puesta en marcha del plan, después de que la exrepresentante a la Cámara por el Atlántico fuera a una cita odontológica en el norte de Bogotá.
En el caso de Merlano Manzaneda se señala que ella fue la persona encargada de llevar la cuerda y otros elementos que fueron clave para que la excongresista se escapara por la ventana del consultorio odontológico y emprendiera la huida.
Igualmente, señala el documento de 22 páginas, que ella fue la encargada de coordinar todo para que el motociclista llegara justo a tiempo para llevarse a Merlano con rumbo a un lugar que ya estaba figado para que se escondiera por unos días en la capital de la República.
“Aida Victoria Merlano Manzaneda realiza todas las gestiones para que en el preciso momento llega una motocicleta al lugar y la recogería para emprender la huida adicional a eso le suministro algunos elementos tales como teléfonos móviles para que ella pudiera culminar y llevar a satisfacción su plan de escape (sic)”, indica el ente investigador.
El ente sostiene que el día de la fuga, la joven de 20 años habló en repetidas oportunidades con su madre mientras estaba en el consultorio médico, hizo unas llamadas y chateó con el fin de coordinar la fuga.
Con su actuar, sostiene la Fiscalía, afectó gravemente la administración de justicia puesto que sabía que su madre estaba cumpliendo una condena de 15 años de prisión por su responsabilidad en delitos electorales.
“Al momento de cometer la conducta Aida Victoria tenía la capacidad para comprender y la capacidad para determinarse con base en su comportamiento, conocía que su contribución a la fuga estaba prohibida por el ordenamiento penal y le era exigible no ayudar a la fuga”, señala otro de los apartes del escrito de acusación.
En otro de los apartes del documento, se reclama que la acusada utilizara para su plan a su hermano de 17 años de edad con el fin que participara en el plan de fuga. La instrumentalización –reseña la Fiscalía- tenía como objetivo que él transportara e ingresara al consultorio varios elementos que le sirvieron a la excongresista para la fuga.
Por estos hechos, Aida Victoria Merlano deberá responder en juicio por su presunta participación en los delitos de fuga de presos y uso de menores agravado (por su parentesco). De ser hallada culpable, se enfrenta a una condena de 20 años de prisión.
Sin embargo, la defensa de la joven ya anunció que presentará formalmente una solicitud para que el caso sea archivado puesto que las pruebas que cita la Fiscalía General no permiten inferir que su defendida participara en estos hechos.
En su concepto, la misma Aida Merlano ha manifestado públicamente que su hija no tuvo participación alguna en el plan para fugarse.
Fuente: Sistema Integrado Digital