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Julio César Cárdenas Uribe, contralor delegado para el sector social.
POR
GIANCARLOS
VILLARREAL LARIOS
La Contraloría General de la República le puso la lupa nuevamente a la capital del Magdalena, esta vez a las obras ejecutadas en tres Instituciones Educativas del distrito; IED Rodrigo de Bastidas, Instituto Magdalena y la IED de Taganga las cuales serán analizadas por el ente de control por las presuntas irregularidades denunciadas que se habrían cometido en estas.
El Contralor Delegado hizo el anuncio durante la instalación de las otras indagaciones que realiza el ente sobre las presuntas irregularidades en la ESE Alejandro Próspero Reverend. “Iniciamos hoy (ayer) este control excepcional a los hospitales, pero la otra noticia es que se van a hacer otro control excepcional que ya se aprobó por parte del contralor General, que va a revisar instituciones educativas que han tenido también problemas y el Plan de Alimentación Escolar” expresó Cárdenas Uribe.
Este nuevo control excepcional iniciaría posterior al que se le realizará a la ESE distrital instalado en la tarde de ayer, y en el cual el contralor delegado también anunció las investigaciones en las obras de la sede de la Escuela Superior de Administración Pública –ESAP que ascienden a los cinco mil 600 millones de pesos; para lo cual se reunió con el director de la ESAP, y Gerente Técnico del Fonade, con el que se contrató la obra.
CONTROL SOBRE LA ESE
En referencia al inicio del control excepcional sobre la ESE Alejandro Próspero Reverend el contralor delegado manifestó que: “Lo que se va a revisar son deudas de los hospitales mal manejo de los recursos, algunas irregularidades en temas contractuales, no pago a los trabajadores entonces todas esas circunstancias que han llevado a que exista una mala prestación del servicio, serán revisadas en este tipo de actuaciones especializadas de fiscalización”.
Agregó que posiblemente dos meses seria el tiempo en el que se desarrolle todo la etapa de revisión de documentación posterior a esto se realizará un informe consolidado con información que entreguen la Contraloría Distrital y la Superintendencia de Salud. “Se van a solicitar información que ha desarrollado el hospital, se va a solicitar que tenga el contralor distrital, y la información que tenga la superintendencia y con base en eso se entregará un informe integral de los que esté pasando en el hospital (…) Hay un primer informe de la actuación especial de lo que ocurre en un hospital y con la información de los otros dos, se va a realizar un gran informe sobre que está ocurriendo en los hospitales de riesgo alto”.
Los centros de salud en los que investigará específicamente son el de La Paz, Taganga y el IPC la Candelaria.
Según el funcionario “Con el análisis que se realizó con la Superintendencia de Salud y con el Ministerio de Salud se determinó que era una ese de nivel riesgo alto, se observó que las obras de tres centros de salud tenían complicaciones las cuales serán revisadas” concluyó Julio Cárdenas Uribe.
El contralor general de la República, Carlos Felipe Córdoba Larrarte, en semanas previas admitió una solicitud de una veeduría ciudadana para que el ente se desplace transitoriamente de su competencia a las contralorías territoriales que vigilan 12 hospitales departamentales que afrontan líos económicos, malos manejos y otras irregularidades y, de esta manera, ejerza control fiscal sobre los mismos.
Los hospitales que serán auditados por la Contraloría Delegada para el Sector Social afrontan graves problemas económicos, sobre todo por pagos pendientes de EPS públicas privadas y, además, en varios casos han sido objeto de reiteradas denuncias sobre malos manejos, situaciones que han llegado a precipitar su cierre y/o intervención.
Junto con la Alejandro Próspero Reverend también se le hará control excepcional a la E.S.E. Luis Ablanque de la Plata, en Buenaventura (Valle); E.S.E Lacario Barbosa Avendaño, en Acandí (Chocó); E.S.E. Hospital Departamental San Francisco de Asís, en Quibdó (Chocó); E.S.E. Hospital José María Hernández, en Mocoa (Putumayo); Hospital Clarence Lynd Newball, en San Andrés; Hospital San Jorge de Pereira (Risaralda); Hospital San Jerónimo de Montería (Córdoba); Hospital Universitario de Santander (Santander); Hospital Universitario de Sincelejo (Sucre); Hospital San Rafael de Girardot (Cundinamarca); y Hospital Universitario del Valle (Valle del Cauca).