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´Vamos a continuar transformando el territorio, sólo así se progresa´

Los representantes indígenas Gabriel Gil Dingula y Manuel Zarabata realizaron un acto simbólico de armonización, así como los representantes del pueblo arhuaco que le entregaron un bastón de mando y una mochila al posesionado rector Pablo Vera Salazar en aras de que siga brindando oportunidades educativas a los jóvenes. /MONTINER ALVIS
Nuestro compromiso con las comunidades nos lleva a tener no solo una, sino tres sedes en territorio, como la que ya está en diseño en la zona rural de Santa Marta, que será “un centro para el conocimiento ancestral”, afirmó.
En una emotiva ceremonia que tuvo lugar en la Plazoleta Los Almendros de la Universidad del Magdalena se cumplió ayer el acto de posesión del rector Pablo Vera Salazar para el periodo 2024-2028.
Al acto acudieron los integrantes del Consejo Académico, estudiantes, directivos, docentes, autoridades del Distrito con el alcalde Carlos Pinedo Cuello y varios miembros de su gabinete, líderes de los distintos sectores económicos, representantes de los pueblos indígenas, de las fuerzas vivas de Santa Marta e invitados de la sociedad civil.
Después de que se entonaron los Himnos del Magdalena y de la Alma Mater, seguidamente hubo una intervención de agradecimiento y protección a la vida del rector Pablo Vera ante Dios Todopoderoso por parte de los líderes religiosos Manuel Ospino Rojas en calidad de pastor y de monseñor José Mario Bacci Trespalacios, Obispo de la Diócesis de Santa Marta.
Posteriormente, los integrantes del Consejo Superior de la Universidad del Magdalena en pleno subieron a la tarima y llamaron al rector Pablo Hernán Vera Salazar para tomarle el juramento de su posesión mediante el acuerdo superior No. 8 del 28 de octubre del 2024.
Los representantes indígenas Gabriel Gil Dingula y Manuel Zarabata realizaron un acto simbólico de armonización, así como los representantes del pueblo arhuaco que le entregaron un bastón de mando y una mochila al posesionado rector Pablo Vera Salazar en aras de que siga brindando oportunidades educativas a los jóvenes.
En su intervención ante la gran concurrencia de asistentes, el rector Vera Salazar inició dándole gracias a Dios por la vida, su victoria en el proceso de consulta y por los retos que le deparará esta tercera temporada en ese cargo.
Fue categórico al afirmar que la Universidad del Magdalena continuará conectada con el territorio para contribuir con la educación a una transformación permanente de la sociedad.
“Agradezco la oportunidad de saludar a todas las autoridades aquí presentes, a los invitados especiales, pero muy especialmente a quienes han hecho posible que hoy esté aquí: a nuestros estudiantes, profesores y funcionarios. Sin su compromiso, esta tercera temporada no sería una realidad. Muchas gracias por estar aquí, por haberme traído, y por haber hecho posible, contra viento y marea, este gran logro. Quisiera poder mencionar a todos, a los 27.130 estudiantes, a los 323 profesores, a los 290 funcionarios, pero el tiempo no lo permite. No obstante, mi agradecimiento es profundo”, indicó.
En su discurso, el rector Pablo Vera saludó a sus jefes: el Consejo Superior, que con su diligencia y apoyo, a pesar de las dificultades políticas, han mantenido la voluntad mayoritaria de la comunidad universitaria.
“Agradezco especialmente a los gobernadores, que son líderes de sus pueblos y que han estado comprometidos con el bienestar de nuestra comunidad. En particular, valoro a los pueblos de Taganga, Arregocés Conchacala, a los miembros del Cabildo Arhuaco, y a todos aquellos que han dado su respaldo a la universidad. Hoy iniciamos este tercer período con la misma mística, el mismo compromiso y entrega, pero con una diferencia: esta vez estamos cara a cara con nuestra comunidad, recuperando el contacto humano que tanto necesitamos. Hace cuatro años, nos vimos obligados a hacer una posesión a través de una fría pantalla, y aunque la presencia de la doctora Mercedes de la Torre fue siempre elegante y sobria, ese proceso fue agridulce. Sin embargo, hoy, ver cómo hemos crecido, cómo el espacio que antes no cabía lleno de estudiantes, ahora se desborda, es una muestra clara del esfuerzo colectivo”.
Según el rector, los logros alcanzados no son solo números sino historias, sueños cumplidos, historias de transformación, semillas que se siembran. “Esos logros no son míos, sino de un equipo comprometido desde el inicio de mi gestión. Agradezco profundamente a mi vicerrectora académica, la profesora María Dilia, al ingeniero Ernesto Galvis, al ingeniero John Taborda, a todos los decanos y a cada uno de los miembros de este equipo que ha hecho posible este proyecto. También, a aquellos jóvenes que hace ocho años se rebelaron y lucharon para que este cambio fuera posible. Hoy, muchos de ellos ya no son estudiantes, sino profesionales, y tengo el honor de que formen parte de mi equipo. Esta universidad cree en sus graduados, y por eso, se les brinda la oportunidad de seguir contribuyendo a la transformación de nuestra región”, recalcó.
MENSAJE A LA GOBERNACIÓN
De manera directa y sin tapujos exteriorizó uno de sus anhelos en este nuevo derrotero “ojalá que la Gobernación del Magdalena, con su próximo líder, entienda la importancia de apoyar a la universidad con una financiación acorde a nuestra dimensión y a las necesidades de nuestros estudiantes. Estamos comprometidos con la creación de nuevas carreras académicas, como la Ingeniería Energética y Ciencia de Datos, programas pioneros en Colombia, pues la universidad debe atreverse a hacer lo que otras no han hecho. En términos de infraestructura, hemos avanzado con proyectos que facilitan el trabajo de nuestros investigadores, quienes a menudo se ven limitados por espacios insuficientes. No podemos pensar solo en aulas de clase sin considerar la infraestructura necesaria para la investigación”.
INCLUSIÓN Y DIVERSIDAD
En el acto de posesión del rector quedó develado el reconocimiento también a la inclusión, la diversidad y la interculturalidad porque fue más que una ceremonia. “Estamos aquí celebrando la ancestralidad viva de los pueblos originarios, un conocimiento que no debemos buscar en los restos arqueológicos, sino que está vivo, a nuestro alrededor, todos los días. Nuestro compromiso con las comunidades nos lleva a tener no solo una, sino tres sedes en territorio, como la que ya está en diseño en la zona rural de Santa Marta, que será un centro para el conocimiento ancestral”, aseveró el rector Vera.
Y agregó que su compromiso refleja la visión de una universidad que no solo emula modelos extranjeros, sino que también reconoce lo mejor de nuestra cultura, historia y saberes.
“Este bastón que recibí no es un símbolo de poder, sino un símbolo de servicio. Lo que representamos con este bastón es nuestra independencia académica, nuestra capacidad de construir un modelo de universidad propia, una que mezcle lo mejor de la ciencia con lo mejor del conocimiento ancestral. Si somos capaces de integrar estos dos mundos, seremos una universidad de referencia para el mundo, capaz de desarrollar tecnologías propias y generar un conocimiento que beneficie a toda la región”, anotó.
Finalmente, el rector Pablo Vera concluyó diciendo que “hoy comienzan cuatro años más de trabajo, un día más, ni un día menos. No me lanzo a otros proyectos, mi camino sigue aquí, y el 26 de noviembre de 2028, cuando llegue el final de este período, Dios sabrá dónde nos llevará. Mientras tanto, seguimos formando líderes y lideresas que transformarán el departamento y seguirán cambiando vidas. Muchas gracias por querer a la Universidad del Magdalena y por hacerme tan feliz”.