Listo plan piloto para la reapertura del centro histórico de Cartagena

Con miras a la reapertura de nuevos sectores económicos en Cartagena en julio, la Cámara de Comercio presentó ante el Ministerio del Interior un plan piloto para la reactivación del Centro Histórico, en el cual se contempla la apertura de las actividades exceptuadas por el Gobierno y también de negocios como bares, restaurantes y ventas de comida a nivel presencial. También se contempla la apertura de las curadurías y de algunas iglesias para oficiar misas.

El piloto contempla las zonas del Centro Amurallado, La Matuna, San Diego y Getsemaní, y prohíbe la circulación a personas menores de 18 años y mayores de 70 años, ya que esta población según lo dictamina el Ministerio de Salud es la más vulnerable a contraer el virus.

Con miras a la reapertura de nuevos sectores económicos en Cartagena en julio, la Cámara de Comercio presentó ante el Ministerio del Interior un plan piloto para la reactivación del Centro Histórico, en el cual se contempla la apertura de las actividades exceptuadas por el Gobierno y también de negocios como bares, restaurantes y ventas de comida a nivel presencial. También se contempla la apertura de las curadurías y de algunas iglesias para oficiar misas.

El piloto contempla las zonas del Centro Amurallado, La Matuna, San Diego y Getsemaní, y prohíbe la circulación a personas menores de 18 años y mayores de 70 años, ya que esta población según lo dictamina el Ministerio de Salud es la más vulnerable a contraer el virus.

Rodríguez apuntó que se propone una temporalidad de un mes para examinar cómo se comporta la gente durante este piloto y de esta manera evaluar si es exitoso y si el modelo se puede replicar a otras zonas de la ciudad.

“Vamos a vivir con el coronavirus por mucho tiempo y tenemos que adaptarnos a la nueva normalidad porque ya los empresarios están agonizando”, afirmó.

Los sectores

Los sectores que abrirían dentro del piloto serían los establecimientos comerciales, los restaurantes, bares y sitios de belleza. “También pensamos en una apertura de las discotecas pero no en modo rumba sino únicamente en servicio de bebidas o comidas de manera presencial donde las personas puedan ir, sentarse y pasar un rato”, explicó Rodríguez.

La idea es que se pueda avanzar hacia la vida comercial de manera presencial con todos los protocolos de bioseguridad correspondientes.

“Los domicilios no representan ni el 30% de la facturación de los restaurantes, por lo que sus ingresos con todo y ventas online han bajado en un 70%. Eso no da para cubrir arriendo en el Centro, nómina, materia prima, entre otros gastos”, manifestó.

En este orden de ideas, con el fin de incentivar la recuperación económica de lo perdido, desde la entidad cameral se propone disponer plazas y parques para la atención de clientes. “Hay algunos bares y restaurantes que son muy pequeños, y si adicionalmente se les limita al 30% de la capacidad de su planta física más las medidas de distanciamiento, les será muy difícil salir adelante en la reapertura. Por esto queremos gestionar con Espacio Público para ampliar la capacidad instalada de los negocios y poder garantizar su viabilidad. Claramente esto sería por tiempo limitado”, explicó Rodríguez.

Además recalcó que todas las empresas que vayan a abrir tienen que tener su protocolo de bioseguridad previamente avalado por la Alcaldía y todos los empleados que vayan a trabajar deben tener la aplicación ‘Cuidémonos’ para hacer el control epidemiológico pertinente.

Según cifras de la Cámara de Comercio de Cartagena, actualmente son 1.073 establecimientos en el Centro Histórico los que pueden operar de acuerdo al último decreto emitido por el Distrito, el 46% ubicado dentro del Centro Amurallado, el 22% en La Matuna, 21% en San Diego y el 11% en Getsemaní.

Los horarios

Respecto a los horarios de apertura, se propone que sean de forma escalonada: 8 a.m., 9 a.m. y 10 a.m.; de la misma manera con los horarios de cierre. “Si entran todos los negocios a una misma hora se van a generar picos en la demanda de transporte, lo cual podría generar aglomeraciones”, señala Rodríguez.

En cuanto a restaurantes y bares, por su naturaleza se propone un horario de cierre hasta las 10 p.m.

Movilidad y acceso

Previendo el crecimiento de la demanda en Transcaribe que generará la apertura del Centro Histórico, se propone que existan personas que hagan el rol de acomodadores y supervisores tanto en las estaciones como en los buses, las cuales controlen las medidas de bioseguridad y distanciamiento social.

De igual manera, los boquetillos serán dispuestos para la entrada y la salida de personas, de forma que, unos sean utilizados para el ingreso y otros para la salida del Centro Histórico, con el fin de evitar contraflujos.

“No queremos poner puntos de control con toma de temperatura y eso porque creemos que pueden generar cuellos de botella en los puntos de acceso. Con el piloto debemos empezar a cambiar la cultura que tenemos y volvernos más responsables. Es decir, son los mismos empresarios los que deben hacer cumplir las normas de bioseguridad. Lo que sí tendremos son policías y vigías que harán rondas verificando que las normas se estén cumpliendo”, puntualizó Rodríguez.

El plan está puesto a disposición del Distrito y del Gobierno nacional para ser aprobado y comenzar a implementarse en julio.